Para dar respuesta a los aumentos desmedidos sobre la carne son varios los factores que propician las disparadas de precios y preocupan al gobierno a la hora de tomar la decisión de suspender por 30 días la exportación. Uno de ellos se enfoca en eliminar uno de los vericuetos claves en la gestión contra el aumento especulativo de precios que no cedió pese a las últimas medidas. Es por esto que el denominado “rulo cárnico” estuvo presente en la reunión del lunes por la noche de las máximas autoridades.
Si los funcionarios logran hallar la solución a esta problemática, se podrían resumir las ventas al exterior antes de la fecha pautada. Vale recordar, en este sentido, que en febrero, el Ministerio de Agricultura encontró a
15 compañías que intentaban vender 40 toneladas por fuera de los controles del Estado: Compraban a los animales en el Mercado de Liniers a un precio elevado para garantizar su obtención y luego los exportaban irregularmente al dólar contado con liquidación. Da manera tal que impulsaban alzas precipitadas en los precios de las góndolas y las carnicerías.
En este sentido, se habían identificado a varias organizaciones que se dedicaban a la exportación de carne y granos que mantenían como objetivo evadir los controles del Estado Nacional.
Esto implicaba una competencia desleal sobre el resto de los operadores, que cumplen con la ley. Para imaginar el daño que esto dejó en las arcas públicas, vale con solo tener en cuenta, que por ejemplo, uno de los integrantes de ese grupo llegó a operar por U$S 20 millones, de los cuales no entró un solo billete al país.
Además de la evasión y la violación a la ley penal cambiaria, esta maniobra impacta fuerte en los precios. Por esa razón la estrategia avanzó al ámbito político y pese a que se intensificaron los controles en los últimos meses, no se pudo desterrar esta práctica del mercado cárnico. Por tanto en esta pausa a las exportaciones, el Gobierno busca reforzar los controles para cuando las exportaciones retomen y así evitar la práctica del "rulo" con la carne que, además de su componente especulativo, moviliza el precio interno de la carne al alza.
Esto fue confirmado por el ministro de Desarrollo Productivo,
Matías Kulfas, quien planteó que "ojalá las restricciones sean por menos tiempo.
Si los objetivos se cumplen antes del plazo, la idea es levantarlas". El titular de la cartera productiva se refirió a los "desórdenes", al advertir sobre "procesos de evasión" por parte de la industria frigorífica, al tiempo que criticó los aumentos "desmedidos" de la carne. Argumentó que, más allá de los factores estacionales, "en marzo, abril y los primeros días de mayo siguió subiendo".
Kulfas insistió en que el Presidente le indicó a los empresarios del sector que "si las soluciones se encuentran en tres días o una semana, se reabren en una semana (las exportaciones) y aquel que está operando correctamente, en blanco, y liquida sus exportaciones, no va a tener ningún problema".
