
Después de que la Corte Suprema de Justicia de la Nación fallara que el Frente de Todos debe quedarse con un lugar menos en el Consejo de la Magistratura y que ese lugar va para Juntos por el Cambio, se desató un fuego cruzado entre el oficialismo y la oposición alrededor de la legalidad de la decisión y el rol del presidente de ambos organismos judiciales, Horacio Rosatti.
El senador nacional beneficiado por la decisión del máximo tribunal, de concretarse, es Luis Juez, quien esta mañana celebró el fallo que le otorgaría la banca en el Consejo de la Magistratura y criticó al bloque del FDT, que más tarde cuestionó con dureza a la Corte y a JXC.
“Lo que dice la Corte es inapelable, que hagan la conferencia y pataleen lo que quieran, pero van a tener que cumplir porque fueron puestos en evidencia”, enfatizó el legislador que busca, enrolado en JXC, ser candidato a gobernador de Córdoba.
La Corte anuló ayer por la tarde la designación del senador del FDT Martín Doñate como integrante del Consejo, el organismo que se encarga de proponer la designación de los jueces, sancionarlos y destituirlos, y así le regaló su lugar a Juez.
La decisión hizo lugar a la acción de amparo iniciada por el cordobés y revocó el nombramiento de Doñate, que había sido firmada por la presidenta del Senado, Cristina Kirchner, luego de que el bloque del FDT se dividiera en el Senado para propiciar un lugar más en el organismo.
“Se me cagaron de risa por ir a la Justicia. Nosotros tuvimos que seguir toda la vía recursiva, seguimos insistiendo hasta el recurso extraordinario ante la Corte”, se burló ahora Juez en declaraciones a varias radios radio, tras el derrotero de su presentación judicial.
Según el senador, "la Corte no ha dicho nada extraño, lo único que ha dicho es que fue una maniobra estafatoria y que está mal hecha". E insistió: "No podés quedarte con un lugar solo porque tenés poder”.
En el fallo, el tribunal que encabeza Rosatti, quien también preside justamente el Consejo, se arrogó la función de “ejercer una revisión judicial severa acorde a la trascendencia institucional de la cuestión involucrada, en la cual se encontraba en juego el correcto funcionamiento de las instituciones de la República”.