24.11.2022 / Judiciales

Dos años de la muerte de Maradona: qué pasa con la causa, quiénes son los acusados y qué pena tendrían

Cuando se cumplen dos años de la muerte del Diez, se espera que Justicia defina si la causa va a juicio oral. Allí, ocho acusados de "homicidio con dolo eventual" continúan trabajando en salud. Qué penas podrían recibir el neurocirujano Luque y la psiquiatra Cosachov, entre otros.




Este viernes 25 de noviembre se cumple dos años de la muerte de Diego Armando Maradona, máximo futbolista de la historia mundial e ídolo argentino. Entre otras cuestiones que arroja el hecho, una es que la causa espera la confirmación de su elevación a juicio oral por parte de la Justicia mientras los ocho acusados de haber cometido un "homicidio con dolo eventual" siguen trabajando en salud.

Quien debe definir si se eleva a juicio oral el caso es la Cámara de Apelaciones de San Isidro. Los ocho acusados de ocasionar la muerte de Maradona son el neurocirujano y médico de cabecera de Maradona, Leopoldo Luciano Luque (41); la psiquiatra Agustina Cosachov (37); el psicólogo Carlos Ángel "Charly" Díaz (30); la médica coordinadora de la prepaga Swiss Medical, Nancy Edith Forlini (53); el coordinador de enfermeros Mariano Ariel Perroni (41); los enfermeros Ricardo Omar Almirón (39) y Dahiana Gisela Madrid (38); y el médico clínico Pedro Pablo Di Spagna (49).

Justamente respecto de estos, un informe de la agencia Télam que incluyó la consulta a las defensas de los acusados arroja que todos ellos, pese a estar procesados por graves situaciones en la causa, sigue trabajando en sus respectivas actividades vinculadas a la salud, incluso hospitales públicos y privados.

El más famoso de los acusados, por su alto perfil mediático, Luque, sigue como neurocirujano en el Hospital El Cruce de Florencio Varela y en el porteño Hospital Alemán. Cosachov, en tanto, trabaja en su consultorio privado y en un hospital del Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires.

El psicólogo Díaz en distintas ONG de tratamiento de adicciones y también con pacientes privados; Forlini lo hace en el Swiss Medical Group; mientras que Di Spagna es parte del cuerpo médico del plantel de futbolistas del club Huracán, entre otras labores en salud que siguen teniendo los acusados. 


LA CAUSA Y EL JUICIO ORAL

El juez de Garantías 2 de San Isidro, Orlando Abel Díaz, luego del requerimiento del equipo de fiscales que instruyó la causa, elevó hace ya seis meses el expediente a juicio oral. 

Sin embargo, el freno lo colocaron las defensas de los ocho imputados, que apelaron aquella resolución y desde entonces la causa está bajo el análisis de la Sala III de la Cámara de Apelaciones y Garantías de San Isidro.

Los camaristas Gustavo Adrián Herbel y Carlos Fabián Blanco -y si hay disidencia suman a Ernesto García Maañón- definirán el futuro de los ocho profesionales de la salud y el hallazgo de justicia para la muerte de Maradona.

Según fuente judiciales a Télam, el último movimiento del expediente fue que el defensor de Cosachov, Vadim Mischanchuk, solicitó ante la Cámara lo que técnicamente se denomina audiencia del artículo 447 del Código Procesal Penal bonaerense, y que se realiza para mejorar en forma oral los argumentos de su apelación.

En dicha apelación, la última psiaquiatra del ex DT de la Selección argentina pidió su sobreseimiento y, en su defecto, un eventual cambio a una calificación más benigna para su clienta.

A este pedido se sumó también el defensor de la enfermera Madrid, por lo que antes de tomar la decisión de si manda a todos a juicio o no y si será con la imputación que a cada uno de ellos le hizo la fiscalía, la Sala III de la Cámara de San Isidro deberá fijar una fecha para esta audiencia.

Si la Cámara de San Isidro confirma todo lo actuado en la instrucción, la causa irá a sorteo para designar al Tribunal Oral en lo Criminal de San Isidro que deba juzgar. Según las estimaciones más generosas, si sucede esto el juicio oral iniciaría pero no antes del segundo semestre de 2023.

Cuando el 22 de junio pasado elevó la causa a juicio, el juez Díaz sostuvo que los ocho imputados no cumplieron "con el mandato de actuar que la buena práctica médica colocaba en sus cabezas", y que como "garantes" de la condición del exfutbolista, tuvieron la posibilidad de "revertir" su cuadro cardíaco y no lo hicieron.

En su fallo, Díaz también elevó a juicio a Luque por el delito de "uso de documento privado falso", porque le imputan haber usado una firma falsificada de Maradona para pedir una historia clínica; y a Cosachov por "falsedad ideológica", ya que se la acusa de haber confeccionado un certificado de aptitud mental de Diego sin ir a visitarlo.

Los fiscales Ferrari, Iribarren y Capra y el juez Díaz coincidieron en que todos deberán enfrentar una imputación como presuntos coautores de un "homicidio simple con dolo eventual".

Pese a ser un delito que tiene una pena en expectativa de 8 a 25 años de prisión, los fiscales nunca pidieron las detenciones y los ocho acusados siempre estuvieron en libertad y así llegarán al juicio oral si se confirma para ellos.

Maradona, la mayor figura de la historia del fútbol mundial, murió a los 60 años de un edema pulmonar y una falla cardíaca el 25 de noviembre de 2020 en una casa del barrio privado San Andrés, de Tigre, donde transitaba una cuestionada internación domiciliaria por su adicción al alcohol y luego de haber sido sometido a una neurocirugía.

Los chats entre los imputados dejaron en claro que Maradona hacía días que estaba desmejorado, que no se alimentaba bien, que no se levantaba de la cama y que estaba edematizado y con taquicardia, signos de una falla cardíaca que ninguno de los profesionales tratantes tomó en serio para prevenir el desenlace.