El radicalismo bonaerense que lidera el senador Maxi Abad y el espacio de Emilio Monzó avanzaron en el armado de una alianza de centro para competir en la provincia de Buenos Aires. El pacto apunta a presentarse con una oferta moderada que atraiga a votantes desencantados con la polarización entre el oficialismo y La Libertad Avanza.
De acuerdo a una noticia de La Política Online, el entendimiento en principio agruparía a 26 intendentes de la UCR, el sector de Monzó, el GEN de Margarita Stolbizer, la Coalición Cívica de Elisa Carrió, el partido Unión, Renovación y Fe de Carlos Kikuchi y otras fuerzas vecinales. Según fuentes al tanto de las negociaciones, “si todo sigue como hasta ahora la idea es presentar formalmente la alianza el próximo miércoles y hacer una reunión el domingo siguiente para ordenar el armado”.
De concretarse este acuerdo, el grueso del radicalismo quedaría afuera de la alianza entre el PRO y La Libertad Avanza, pues los intendentes de la UCR se mostraron reacios a sumar a los libertarios locales. Esa resistencia impulsó la búsqueda de alternativas propias y cimentó el acercamiento con Monzó.
Una incógnita para resolver en los próximos días es qué sucederá con el espacio “Para Adelante” que conformó Facundo Manes junto a sectores del radicalismo, peronistas no kirchneristas y exdirigentes del PRO. Además, persiste la duda sobre el apoyo de Mauricio Macri, quien, según LPO, se reunió con Monzó, Joaquín de la Torre y los hermanos Passaglia para tantear la posibilidad de un frente de centro.
Para encabezar las secciones electorales suenan varios nombres: en la Primera sección, Margarita Stolbizer; en la Tercera, Carlos Melconian; en la Octava, Julio Garro; en la Cuarta, el propio Monzó; en la Quinta, Miguel Lunghi; en la Sexta, Virginia Linares; y en la Séptima, Juan Manuel López. La Segunda sección quedaría sin lista como gesto hacia los hermanos Passaglia, que competirán con una propuesta propia dentro del armado “Hechos”.
Según LPO, “El lanzamiento de una opción fuerte de centro podría ser una mala noticia para el gobierno, ya que podría comerle votantes a LLA y no al peronismo. En una elección que se prevé polarizada, el crecimiento de una tercera opción podría ser determinante.”