El Gobierno dispuso la baja de retenciones a cero por 39 días para las exportaciones de granos con el objetivo de asegurar una mayor oferta de dólares, luego de vender u$s1.110 millones en solo tres días la semana pasada en pos de contener la volatilidad del dólar, que el miércoles perforó el techo de la banda y que el viernes llegó a los $1.523 para venta minorista.
El vocero presidencial, Manuel Adorni, fue el responsable de anunciar la medida: “La vieja política busca generar incertidumbre para boicotear el programa de gobierno. Al hacerlo castigan a los argentinos: no lo vamos a permitir. Por eso, y con el objetivo de generar mayor oferta de dólares durante este período,
hasta el 31 de octubre habrá retenciones cero para todos los granos”, compartió.
La medida se confirmó apenas horas después de que el Gobierno anunciara la promulgación de la emergencia en discapacidad, pero a la vez la prórroga del ajuste al sector, luego de aclarar que su implementación quedará condicionada a que el Congreso contemple las partidas necesarias en el Presupuesto Nacional por "falta de financiamiento", mientras se adelantan ajustes presupuestarios puntuales para cubrir gastos urgentes del sistema de prestaciones.
El decreto establece un tope de liquidación de 7.000 millones de dólares y fija un plazo máximo de tres días hábiles para que los exportadores liquiden al menos el 90% de las divisas producto de sus operaciones. La norma rige para quienes presenten declaraciones o permisos de embarque desde la entrada en vigor del decreto hasta el cierre del período contemplado.
La decisión se tomó tras reuniones urgentes del equipo económico durante el domingo, en las que participaron directores del Banco Central, funcionarios del Ministerio de Economía y del Banco Nación, con el objetivo de contener la suba del dólar y fortalecer las reservas internacionales. La medida refleja la preocupación del Gobierno ante la volatilidad cambiaria luego de la quema de reservas de la semana anterior.
En el sector agropecuario, la medida habría causado sorpresa. El presidente de la Sociedad Rural, Nicolás Pino, admitió su desconcierto, mientras desde el Gobierno explicaron que algunas cerealeras retenían la cosecha anticipando una devaluación posterior a las elecciones. “El anuncio de retenciones cero evidencia la desesperación después de haber quemado más de 1.000 millones de dólares de reservas la semana pasada”, reconocieron fuentes oficiales.
El decreto también faculta al Banco Central, a la Secretaría de Agricultura y a la Agencia de Recaudación y Control Aduanero a dictar normas complementarias para garantizar el cumplimiento del régimen. Además, establece que aquellos exportadores que no cumplan con los requisitos deberán pagar la alícuota vigente antes de la resolución y quedarán temporalmente excluidos del beneficio.