Tras recibir a 20 gobernadores en la Casa Rosada, el presidente Milei calificó el encuentro como “extremadamente positivo” y aseguró que la construcción de políticas requiere la participación de la mayor cantidad de argentinos posible. “Inexorablemente, con los que coinciden en el rumbo, hay que abrir una ventana de diálogo. De ese debate van a surgir buenas cosas. Van a surgir mejores leyes de ese intercambio, no tengo dudas”, afirmó luego de los resultados que favorecieron a su espacio en las elecciones.
Ante la presión de Donald Trump que condicionó el acuerdo con el Tesoro estadounidense al apoyo político que pueda lograr Milei, este subrayó que busca dejar atrás diferencias con los gobernadores para avanzar con sus promesas de campaña. “Lo que nosotros habíamos planteado como reformas de primera generación lo hemos cumplido todo. Es momento de seguir adelante con las de segunda generación”, explicó, destacando que todos los mandatarios presentes respaldaron la reforma laboral.
Entre los gobernadores que participaron estuvieron Osvaldo Jaldo, Raúl Jalil, Maximiliano Pullaro, Claudio Poggi, Alberto Weretilneck, Rogelio Frigerio, Gustavo Valdés, Marcelo Orrego, Hugo Passalacqua, Ignacio Torres, Claudio Vidal, Gustavo Sáenz, Martín Llaryora, Sergio Ziliotto y Gerardo Zamora, entre otros. Sin embargo, no fueron invitados Axel Kicillof, Ricardo Quintela, Gildo Insfrán y Gustavo Melella.
Sobre estas ausencias, Milei señaló que “si se repiten recetas que son las que hundieron a la Argentina en la decadencia de los últimos 100 años es muy difícil tener un diálogo razonable. No nos podemos juntar con gente a la que dos más dos no le da cuatro”. En esa línea, el jefe de Ministros, Guillermo Francos, calificó de "pérdida de tiempo" interacciones con mandatarios como Kicillof, por su ideología opositora.