01.02.2017 / Judiciales

Stiuso solicitó ser querellante y pidió sacar al juez y al fiscal de la causa por el audio de CFK y Parrilli

El exespía aseguró ser "víctima de una persecución" y quiere ser querellante. Además, reclamó que se aparte al magistrado Sebastián Casanello argumentado que existen dudas sobre su "imparcialidad", y al fiscal Franco Picardi por haber sido judicial durante la anterior gestión.



El ex jefe de Operaciones de la SIDE, Antonio "Jaime" Stiuso, pidió sacar al juez federal Sebastián Casanello y al fiscal Franco Picardi de la investigación de la causa por el audio entre la expresidenta Cristina Fernández de Kirchner y el extitular de la AFI, Oscar Parrilli.

A través de un escrito de 20 carillas presentado ante Casanello por su defensa, Stiuso pidió ser querellante en la causa, de manera que pueda tener acceso al expediente, pedir medidas de prueba y participar eventualmente en un futuro juicio oral.

Según fuentes judiciales citadas por la agencia Télam, el polémico exespía argumentó que se debe correr al magistrado de esta causa contra CFK denunciada por el fiscal federal Guillermo Marijuan porque ya fue apartado antes de otra causa que involucraba a "Jaime" por supuesto enriquecimiento ilícito. En esa línea, puso en duda la "imparcialidad" de Casanello.

En cuanto a Picardi, justificó su recusación al afirmar que el fiscal fue funcionario del Ministerio de Justicia de la Nación en la época en que se redactó el Memorándum de Entendimiento con Irán por el atentado a la AMIA, durante la anterior administración nacional.

En el texto, Stiuso también sostuvo que es "víctima de una persecución" y recordó que en la escucha de la conversación entre la exmandataria y Parrilli que fue difundida por medios -lo cual valió que CFK denuncie "espionaje político" dada la ilegalidad de la obtención de ese material judicial-, ella pronunció la frase "hay que matarlo". "Más allá de la frase poco feliz", según el exespía, aludió a la necesidad de "contextualizar".

La escucha de la conversación surgió a raíz de una causa contra Parrilli por supuesto encubrimiento al narcotraficante Ibar Pérez Corradi. La expresidenta presentó una denuncia contra el gobierno de Mauricio Macri por abuso de autoridad y violación de secreto y de deberes de funcionario público, luego de la filtración del diálogo telefónico.

"No es ningún secreto que ciertos sectores de los servicios de inteligencia que desplacé de la entonces Secretaría de Inteligencia (SIDE) se mantienen activos", indicó la ex jefa de Estado.