Los representantes de la Unión Industrial Argentina se reunirán con los ministros del Gobierno de Mauricio Macri en búsqueda de limar asperezas y bajar las tensiones generadas en los últimos días con declaraciones cruzadas desde ambos bandos. La cúpula de la UIA tendrá la posibilidad de sentarse con el ministro de producción Francisco Cabrera y el jefe de Gabinete Marcos Peña.
A la reunión llegarán el presidente de los industriales Miguel Acevedo, y los vicepresidentes Luis Betnaza (representante de Techint) y Daniel Funes de Rioja (por la Copal, la entidad que agrupa a las alimenticias). Después de que Cabrera declare que los empresarios son llorones, el propio Acevedo chicaneó que irá a la reunión con un paquete de "pañuelos Carilina" aunque el reclamo se puntualizará en los costos laborales y las cargas impositivas.
Funes de Rioja como representante de la Copal centrará el reclamo en el control de las importaciones y las dificultades que encuentra la empresa Arcor a la hora de competir con productos externos. Por su parte Betnaza encabezará la protesta del poderoso grupo de Paolo Rocca que en las últimas semanas se encontró con aumentos en las tasas para exportar acero a los Estados Unidos, lo que desembocó en una charla formal entre el propio Macri y su par estadounidense Donald Trump.
Los empresarios y el propio Macri conocen las reglas del juego, es que convivieron en el rubro durante muchos años y ahora Mauricio los quiere acorralar a que compitan tanto con la inversión interna como externa. Ahí surge el nuevo favoritismo del Presidente por Marco Galperin, el fundador de Mercado Libre al que pone como ejemplo ante cada queja del establishment industrial.