A pesar de manifestarse públicamente en las calles de su país sin problemas y de la amplia y favorable cobertura mediática que recibió en la Argentina, incluido el nombramiento de una "embajadora" paralela que trabajaba para Cambiemos,
el autoproclamado "presidente encargado" de Venezuela, Juan Guaidó, le dio una entrevista a Clarín que desnuda la manipulación que recibe por parte de los Estados Unidos y el vínculo de esa relación con la prensa de Buenos Aires, entre otras.
Es que el diario conducido por
Héctor Magnetto publicó hoy un reportaje a Guaidó en el que
se explicita que a pesar de haber hablado varias veces por teléfono con el "joven dirigente" antichavista que preside la Asamblea Nacional del país bolivariano, la entrevista fue "un intercambio de preguntas y respuestas por escrito" realizado a través de asesores venezolanos que trabajan en Washington y son "su línea" directa con la administración de Donald Trump.
"Tras días de
llamados telefónicos al joven dirigente que se le plantó con un gobierno paralelo al régimen de Nicolás Maduro,
este diario accedió a un intercambio de preguntas y respuestas por escrito a través de los asesores de Guaidó en Washington.
Funcionarios que son su línea directa con Estados Unidos y otros países, como Argentina, adonde Guaidó acaba de nombrar como su representante a Elisa Trotta Gamus", se consigna en la nota de Natasha Niebieskikwiat, en la que también cuenta que el "presidente encargado" se tomó cinco días para dar 9 breves respuestas.
Allí, Guaidó se mostró agradecido con
Mauricio Macri y con el titular de la OEA,
Luis Almagro, por el apoyo que le dieron.
"El presidente Macri ha sido uno de los líderes mundiales de los que más soporte hemos sentido", dijo sobre el mandatario argentino, mientras que sobre al segundo lo calificó como
"el más venezolano de los uruguayos".
No obstante, la
respuesta más polémica de quien responde entrevistas a través de los Estados Unidos fue cuando lo consultaron respecto de si
"estaría de acuerdo con una intervención armada en Venezuela para sacar a Maduro y su régimen". Si bien sostuvo que espera que eso
"nunca ocurra" porque prefiere "evitar un desenlace violento",
Guaidó no descartó que se produzca una embestida bélica internacional e incluso aclaró que no hay que "llamarse a engaño", porque "un régimen como el de Maduro es una amenaza para los vecinos de Venezuela y para toda la región".
"Con absoluta sinceridad le digo que espero que eso nunca ocurra. Nuestra lucha democrática y apegada a la Constitución es muy difícil, pero la hemos dado en ese terreno porque creemos en ella y porque precisamente queremos evitar un desenlace violento. Sin embargo, no nos llamemos a engaño, un régimen como el de Maduro es una amenaza para los vecinos de Venezuela y para toda la región", afirmó.
