El gobernador de Córdoba Juan Manuel Schiaretti llevará lista corta para los cargos legislativos nacionales pero tiene bien en claro cual es su forma presidencial favorita. Por eso después de que Rogelio Frigerio y el Gobierno cancelara la primera gira por el país, el cordobés le cedió el territorio a Miguel Ángel Pichetto para largar la campaña.
"No le pedí nada (a Schiaretti) porque respeto la decisión del peronismo de Córdoba de ir con boleta corta. Eso le da libertad de acción a los electores", sostuvo Pichetto tras el encuentro y recordó que fue al gobernador a quien le avisó primero sobre su decisión de pasarse al macrismo.
El rionegrino que vio como el Gobierno nacional perdía una intendencia en su provincia durante la jornada electoral del domingo negó estar enojado por el cierre de listas.
"No es cierto que esté molesto por espacios en las listas. No solicité cargos", dijo y agregó que "sólo quería un armado en mi provincia con el gobernador, pero aún no se dio", indicó.
Asimismo consideró que "es exagerado decir que estoy en soledad. Hay muchos peronistas que me están acompañando", añadió. "Lo que está en discusión en estas elecciones es si nos seguimos integramos al mundo o nos aislamos. Había que optar y yo hacía atrás no vuelvo", dijo.
Desde la gobernación de la provincia de Córdoba argumentaron que no se trata de un "blanqueo" de las preferencias electorales de Schiaretti para esta elección y que recibirán a cualquier candidato presidencial que visite las tierras y solicite una audiencia "incluso si es Cristina".