La directora del PAMI,
Luana Volnovich, aseguró que el sábado durante el operativo frente a la casa de Cristina Kirchner la “agarraron de los pelos entre varios varones” de la Policía de la Ciudad y señaló que no se cumplieron los protocolos de género, que hubo agravios y un uso excesivo de la fuerza.
“En el marco de toda la represión empezaron a golpear a un compañero y cuando salí a defenderlo me empezaron a dar a mí. No se ve en la imágen, pero yo me enfrenté con dos policías, uno varón y una mujer”, comenzó a contar Volonovich en comunicación con AM750 y resaltó, tras considerarlo “ridículo”: “La mujer policía me decía 'mogólica, te voy a meter presa', “esa es la formación que tienen los efectivos de la Policía de la Ciudad. Utilizando la palabra 'mogólico' como un insulto y descolocada totalmente de su rol institucional”, lamentó.
La directora PAMI explicó que la brutal agresión ocurrió mientras el diputado
Máximo Kirchner era agredido por intentar ingresar a la casa de su madre y contó que previamente habían pasado un cordón policial. “Pasamos el primero. Después, cuando nos encontramos con el segundo, es cuando se empezó a ver una violencia bastante fuerte”, aseguró.
“Así como me pasó a mí, le debe haber pasado a otras tantas mujeres.
A mí me agarraron entre varios varones, de los pelos, y me llevaron, de los pelos, adelante del cordón donde ellos querían que estuviéramos”, denunció.
Además, señaló que esto ocurrió a pesar de que existe un protocolo que dice que “son las mujeres las que nos pueden detener”. “Eso no sucedió. La única mujer que estuvo ahí me dijo lo que me dijo. Con lo cual se hizo todo mal”, puntualizó Volonovich.
Asimismo consideró que la agresión comenzó a raíz de la propia acción policial, y no por la actitud de los manifestantes: “No había clima de violencia cuando llegué. Todos íbamos a nuestras actividades chiquitas que se hacían en la Ciudad. Hacíamos actividades con alegría. Pero terminamos yendo ahí cuando nos enteramos del vallado”.
“Y era un clima de gente que estaba acompañando. Había familias, niños, gente grande. No era un clima denso”, concluyó.