
La jueza federal María Eugenía Capuchetti y el fiscal Carlos Rívolo indagan esta tarde a Fernando André Sabag Montiel, el acusado por el atentado a la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner.
Por cuestiones de seguridad, el acusado no fue trasladado a Comodoro Py y, por eso, la jueza y el fiscal, a cargo de la investigación, fueron hasta la dependencia policial sobre la calle Cavia en donde está alojado Montiel.
La justicia federal investiga si el imputado actuó solo o si respondía a órdenes de alguien más, informaron fuentes judiciales que confirmaron que el arma utilizada estaba "apta para el disparo".
Sabag Montiel, nacido en Brasil hace 35 años, es hasta ahora el único imputado en el expediente caratulado "homicidio calificado en grado de tentativa", aunque los investigadores no descartan ninguna hipótesis.
El intento de atentado se produjo en la noche del jueves cuando la Vicepresidenta saludaba a quienes le manifestaban su apoyo en la puerta de su casa, y el agresor le apuntó a la cabeza con una pistola de uso civil y gatilló dos veces sin efectuar ningún disparo.
Durante la primera parte de la pesquisa, los investigadores intentaban reconstruir el camino completo del imputado hasta que llegó a colocarse a metros de la expresidenta, a la vez que, por medio de una batería de pruebas, intentan determinar "si actuó solo o con alguien más".
La jueza Capuchetti y el fiscal Rívolo ya tomaron una treintena de testimonios entre los que se destaca el de la propia expresidenta, quien los recibió en su casa y pudo reconstruir los hechos desde su óptica, la de la víctima.
La vicepresidenta declaró como testigo durante casi 50 minutos en su departamento de Recoleta, se mostró "entera" y predispuesta a declarar sobre lo ocurrido anoche; "tenía ganas de declarar", señalaron quienes la acompañan desde temprano.