16.03.2023 / Economía

"Rentabilidad cruzada": las empresas en la mira del Gobierno por una maniobra para subir precios

Empresas de alimentos y bebidas serán citadas esta semana por la Secretaría de Comercio por realizar subas de dos o tres veces mayores de sus productos en comercios barriales y pequeños para recuperar la ganancia menor que tienen por aumentar sólo el 3,2% en grandes hipermercados por pertenecer a Precios Justos.





En el Ministerio de Economía crece la preocupación frente a los casos de “rentabilidad cruzada", es decir, aquellas empresas que para recuperar la ganancia menor que tienen por aumentar sólo el 3,2 % en grandes hipermercados por pertenecer a programa de Precios Justos, hacen subas dos o tres mayores de esos mismos productos en comercios barriales, pequeños y chinos.

Conocidos como "los vivos del consumo", según consignó Página 12, serán citados por la Secretaría de Comercio, sobre todo fabricantes de bebidas, que el Gobierno comprobó que hacían este tipo de trampas. Cabe recordar que el rubro de bebidas no alcohólicas fue uno de los que más incidió en la inflación de febrero que se ubicó en el 6,6%.

El Gobierno también trabaja en nuevos esquemas de sanciones para los que incumplan con los pactos.

Los casos más llamativos son el de Coca Cola, la francesa Danone y La Serenísima. Se espera que otros de los citados sean la cervecera chilena CCU, que fabrica todo lo que no es línea Quilmes, y que también produce bebidas sin alcohol.

El convenio que firmaron las empresas que están en Precios Justos obliga a que no suban más que 3,2% los precios de la mercadería que venden a los comercios, pero como el programa no acordó con comercios barriales, la única forma que tiene el Gobierno de controlar que no aumenten más por afuera es siguiendo la traza de la mercadería y yendo a los comercios barriales a ver facturas de los proveedores. Esta mecánica es la que terminó descubriendo sobre aumentos en la Coca Cola de 2,25 litros y en la leche La Serenísima. Ambas empresas recibieron imputaciones.

El martes por la noche hubo una reunión de los equipos de Política Económica con Comercio Interior y el ministro de Economía, Sergio Massa donde analizaron los números globales, causas y consecuencias de la inflación, y se vio allí que un un IPC general de 6,6% de alza y de 9,8% en Alimentos, Bebidas aumentó 9,3%.

Aquí se ve el desvío a comercios barriales y, sobre todo, que hubo subas muy por encima de lo permitido en esos lugares. En particular, analizan el rubro alimentos y bebidas, agrupado en la Coordinadora de Productores de Alimentos (COPAL), pero ha habido otros sectores que sí se alinearon a la meta de aumentos que dispuso Massa. Un ejemplo, los productos de higiene y limpieza para el Hogar, que el IPC estuvo por debajo del 3,2 por ciento.

El tema de la carne fue otro de los puntos a tratar, porque es uno de los que empujó fuerte el IPC con aumentos superiores al 30% en todos los cortes.

En este rubro sucede el mismo problema que con los productos en góndola que se venden en los barrios, no hay formar de controlarlos por la fuerte descentralización de locales que hay. Por eso, en general, no se firman acuerdos fuera de los grandes hipermercados. El problema es que 8 de cada 10 argentinos consumen en los barrios y no en los híper.