
La ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, justificó la brutal agresión propinada por la Policía al fotógrafo Pablo Grillo, quien fue operado y se encuentra en estado grave, y también el ataque de un efectivo a una jubilada.
La funcionaria de Javier Milei sostuvo hoy que la herida de gravedad que sufrió el reportero, provocada por el impacto en la cabeza de un tubo de gas lacrimógeno disparado por la Policía cuando se encontraba tomando fotografías, fue "consecuencia de aquellos que generan violencia".
"Es consecuencia de los que generan violencia y que van a tener como respuesta la represión del Estado", subrayó de manera escandalosa Bullrich, pese a que hay videos de la agresión policial en los que se ve a Grillo agachado para sacar fotos cuando, de repente, un tubo de gas llega en línea recta e impacta contra su cabeza, lo que provoca su desvanecimiento inmediato.
En conferencia de prensa, el CELS denunció esta tarde que este tipo de armas no estaban habilitadas para situaciones como las de ayer, justamente, por el peligro de letalidad que involucran, pero que la responsabilidad del Gobierno es directa porque la posibilidad de ser usadas de esta manera se debe al protocolo antipiquetes lanzado por Bullrich.
La ministra ex PRO y ahora libertaria se refirió, por otro lado, a la "jubilada patotera" que fue primero gaseada y luego tirada al piso de una patada por un policía. Según Bullrich, el efectivo "se defendió del ataque" de la mujer.
"La señora golpeó en reiteradas oportunidades al policía, le dio cinco o seis golpes", explicó la funcionaria nacional, en relación a supuestos impactos con un bastón que la mujer tenía. En los videos, solamente se ve el bastón tirado en el piso junto a la jubilada.