
El Gobierno actualizó nuevamente los precios de los biocombustibles a partir de este martes para evitar "distorsiones", lo que podría tener un impacto en el costo de la nafta y el gasoil, luego de que se implementara una baja promedio del 4% a comienzos de mayo.
La decisión se puso en marcha a través de las resoluciones 195 y 196 de la Secretaría de Energía, publicadas en el Boletín Oficial con la firma de su titular, María Carmen Tettamanti.
Las normas establecen la suba del bioetanol a $788,181 el litro elaborado a base de caña de azúcar y a $722,395 el elaborado a base de maíz (2% de aumento), además de $1.251.837 la tonelada de biodiésel (5% de incremento).
De acuerdo a las resoluciones, estos aumentos responden a subsanar los "desfasajes resultantes de su implementación y los costos reales de elaboración de los productos", aunque también se justifica los aumentos en el caso de que dicho precio pueda generar "distorsiones" en los precios del combustible fósil en surtidor.
El incremento podría tener impacto en el precio de venta de los combustibles, ya que se utilizan para el corte del 5% en la nafta y el gasoil.
Las ventas de combustible al público experimentaron un alza del 0,9% interanual en marzo, lo que representa la primera suba en la era Milei y rompe una racha de 15 meses consecutivos a la baja. A su vez, hubo una suba mensual de 7,3%, traccionada por el segmento premium.