Así lo informó LPO. Según la nota elevada a la compañía estatal, “Se procederá a la relocalización de todos los recursos que esta Contratista mantiene actualmente dentro del predio de Enarsa, correspondiente a la zona de emplazamiento de la Planta Compresora Salliqueló”. Además, advirtieron que “todas las comunicaciones deberán canalizarse exclusivamente por correo electrónico y/o mediante carta contractual, conforme los interlocutores designados por ambas partes”.
El abandono de los trabajos se suma al derrumbe de una estación de medición y al retraso en la finalización de la planta compresora de Salliqueló, expuestos tras el temporal que afectó la provincia de La Pampa. La paralización de la obra pone en riesgo el ahorro estimado en 3.000 millones de dólares anuales y agrava la situación de la infraestructura energética.
En paralelo, el gerente de operación y mantenimiento de Enarsa, Óscar Álvarez, presentó su renuncia esta semana. Una fuente interna señaló que, “mientras el club de asesores que rodeaban a las autoridades de Enarsa se van retirando o huyendo como ratas y con vacaciones pagas, la empresa sigue a la deriva”, lo cual refleja la crisis interna en el organismo.
La falta de avances y el conflicto con la contratista reabren el debate sobre la gestión de Enarsa y la prioridad de recursos para completar un proyecto clave de abastecimiento en pleno invierno. Por ahora, el tramo restante del gasoducto permanece detenido en espera de una resolución financiera.