El índice de precios al consumidor en la Ciudad de Buenos Aires se ubicó en 2,1% durante junio, impulsado principalmente por subas en servicios regulados como electricidad, gas, agua, transporte y prepagas, según informó el Instituto de Estadística y Censos porteño (Idecba). También incidieron en el registro mensual los aumentos en alimentos y bebidas no alcohólicas, así como en el rubro de restaurantes y hoteles, sectores que suelen tener un fuerte peso en el gasto cotidiano.
“Los datos de alta frecuencia muestran que la moderación en alimentos y bebidas continúa: en las últimas cuatro semanas, ese rubro subió apenas 1,1%”, trascendió desde la consultora privada Econométrica.
Con estos resultado, la inflación acumulada en la ciudad durante el primer semestre del año asciende al 15,3%. En tanto, si se mide la variación interanual del costo de vida, el alza fue del 44,5%. El dato porteño forma parte de los indicadores que anticipan el comportamiento del índice nacional, que se prevé publicar el próximo 14 de julio.
A nivel nacional, las consultoras privadas proyectan que el IPC de junio se ubicará en torno al 1,7% o 2%, levemente por encima del 1,5% de mayo. Ese mes, la inflación general había sido moderada por la fuerte caída en productos estacionales, en especial frutas y verduras, que ayudaron a contener el rubro alimentos. A contramano, en junio no se repitió esa tendencia y los precios de esos productos se mantuvieron estables.