En medio del tembladeral que sacude al radicalismo cordobés, Mario Negri se desmarcó públicamente de su hijo Juan, quien fue confirmado como quinto candidato en la lista que encabezan Rodrigo de Loredo y Soledad Carrizo para la interna partidaria del 10 de agosto. “La decisión es absolutamente personal, no la comparto”, expresó el exdiputado a sus correligionarios en un mensaje que circuló por grupos de WhatsApp.
El enojo de Negri padre se suma a las tensiones generadas por la decisión judicial que obligó a De Loredo a enfrentar a Ramón Mestre en las urnas internas. La pelea, que ya escala como la “batalla final” del radicalismo cordobés, expuso fracturas, operaciones fallidas y pases de factura entre dirigentes.
La incorporación de Juan Negri a la lista de De Loredo no solo sorprendió a su entorno, sino que generó acusaciones internas hacia Mario Negri, quien intentó despegarse de toda responsabilidad: “He tomado conocimiento al mismo tiempo que ustedes. Pido prudencia respecto a mi persona o cuestiones familiares infundadas”, dijo en su descargo.
Detrás del fuego cruzado, también hay intereses en juego: mientras Mario pelea un lugar en la Auditoría General de la Nación, Juan apunta a ingresar al Ersep, el ente provincial de control de servicios públicos, donde hoy el mestrismo tiene representación. Las listas ya están oficializadas, pero la guerra radical apenas empieza.