19.09.2025 / POLÉMICA

Sigue el escándalo en la Andis: 565 millones de dólares de organismos internacionales sin destino claro

En apenas un año y medio, la Agencia Nacional de Discapacidad (ANDIS) despidió a 600 trabajadores especializados que se encargaban del control de pensiones, las capacitaciones y la supervisión de obras financiadas por estos préstamos. La reducción de personal alcanzó al 40% de la planta, dejando a menos de mil empleados en todo el país y debilitando la capacidad de ejecución del organismo.





Los préstamos internacionales que debían transformar la vida de las personas con discapacidad en Argentina hoy se encuentran bajo un manto de sospechas. Según detalló DataClave, el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) y la ex Corporación Andina de Fomento (CAF) aportaron 565 millones de dólares para infraestructura, capacitación y programas de inclusión. Sin embargo, los compromisos nunca se cumplieron y en su lugar abundan despidos, recortes y contratos irregulares.



El préstamo estrella del BID, de 265 millones de dólares, se presentó como el “Programa de Apoyo a la Inclusión Social de las Personas con Discapacidad”. Su objetivo era reducir la exclusión y fortalecer la ANDIS con un modelo de gestión moderno. El contrato, aprobado en mayo de 2023 y firmado en junio del mismo año bajo el decreto presidencial 296/2023, asignaba a la agencia la ejecución integral del programa.

Pero las auditorías revelan otra realidad: informes vacíos, charlas motivacionales contratadas como “acciones de inclusión” y empresas fantasma que facturaron millones. Mientras tanto, los proyectos de infraestructura quedaron truncos, las capacitaciones se interrumpieron y las personas con discapacidad ven cómo se esfuman los fondos que debían garantizar sus derechos.

La pregunta que hoy sacude al gobierno es directa: ¿dónde están los 565 millones de dólares? Entre la parálisis de obras, el vaciamiento institucional y los negocios privados, lo que debía ser una política de Estado se convirtió en un nuevo capítulo del ajuste brutal contra los sectores más vulnerables.