El flamante jefe de Gobierno porteño Horacio Rodríguez Larreta vetó sus dos primeras leyes, ambas vinculadas a la intervención del Estado sobre inmuebles y terrenos, afirma el periodista Werner Pertot en su columna en Nueva Ciudad.
El primero fue a un proyecto que le entregaba al Club Atlanta un terreno que está abandonado hace 30 años. La propuesta recibió 58 votos sobre 60 legisladores, incluidos los votos de los legisladores del PRO. Tras la expropiación del terreno, se destinarían a la actividad deportiva, cultural y educativa y deberían ser abiertos para las escuelas públicas. La encargada de reacondicionar el terreno iba a ser la Asociación Civil Atlanta, que también debía indemnizar al titular del predio. Rodríguez Larreta justificó su veto porque
“no surge certeramente cuál es la voluntad de expropiador respecto del inmueble”, entre otros argumentos.
Desde las autoridades del Club Atlanta sospechan que el veto tiene alguna razón oculta. Pertot señala que
junto al predio de la disputa se está construyendo un microestadio que tiene financiamiento del Banco Ciudad y donde aparece la figura de uno de los amigos del presidente: el actor Martín Seefeld, quien tendría la concesión para la venta de entradas de los espectáculos que se hagan en ese nuevo estadio. La empresa de Seefeld, Arena MKT &TKT’S SRL, fue creada el año pasado y tiene socios en común con Javier Ibañez, el funcionario PRO.
El segundo veto fue a otra ley que expropiaba el inmueble del bar La Robla, hoy en día sostenido por la cooperativa que formaron sus trabajadores para mantenerlo abierto. Aquí, el jefe de Gobierno argumenta que la iniciativa perseguía
“un beneficio individual en detrimento del interés común que debe guiar toda política de gobierno” y que una expropiación de este tipo dejaría expuesto al Gobierno porteño a que otras cooperativas de trabajo solicitaran lo mismo que los empleados de La Robla.
"Macri concentra casi la mitad de todos los vetos dispuestos por jefes de Gobierno desde que la Ciudad logró autonomía. En sus dos mandatos, Macri vetó más de cien leyes (cerca del 7 por ciento del total de normas dictadas en su gobierno por la Legislatura). Entre los vetos más recordados de Macri están el que eliminó la Oficina de Trata de Personas, el que hizo caer los principales artículos de una ley que regulaba la publicidad oficial o la anulación de diversos subsidios a organismos de derechos humanos. Pero, sobre todo, los vetos se concentraron en lo social. Macri vetó casi un cuarto del total de las leyes vinculadas al desarrollo social", afirma Pertot.
