A pesar de haber sido presentado como un "acuerdo de caballeros" entre el Gobierno y las empresas del sector, el plan "Precios Esenciales" no es algo tan seguro como anunció el ministro de Hacienda, Nicolás Dujovne, si se tiene en cuenta que no deja de acumular críticas por parte de los empresarios involucrados en la medida. Además de los aumentos que se registraron en la previa, se amontonan los cuestionamientos a su puesta en marcha.
El dueño de la cadena mayorista Maxiconsumo, Víctor Fera, sostuvo que el plan anunciado por Mauricio Macri y sus ministros "no sirve para nada" y advirtió que "no hay ningún pacto de caballeros donde no hay caballeros", ya que "los precios los subieron antes de ponerlos en las góndolas".
"Fue un desastre lo que anunciaron. No lo están cuidando bien los ministros al Presidente. Se está haciendo algo a las apuradas", agregó Fera, que también es dueño de marcas de alimentos como Molto y Marolio. El empresario sostuvo en declaraciones a CNN Radio que las medidas son "parches que no sirven para nada y que encima ponen en ridículo a los ministros Nicolás Dujovne, Dante Sica y Carolina Stanley e inclusive al Presidente".
Para Fera, "lo único que va a frenar los precios es una Ley de Góndolas que regule de una vez por todas las góndolas para que haya competencia". En este sentido, remarcó que "eliminar el monopolio, la cartelización y la corrupción en las góndolas es clave" para controlar la inflación.
A estas críticas se sumó la aclaración que realizó el presidente de la Cámara de Industria y Comercio de Carnes y Derivados de la República Argentina (CICCRA), Miguel Schiariti, respecto de los cortes a $149 que anunció el Gobierno para tratar de "aliviar" los aumentos de ese producto esencial. Según explicó el referente de la industria cárnica, sólo serán más baratos porque no tendrán los mismos costos de distribución que otros cortes debido a una sencilla razón: no llegarán a las carnicerías de barrio.
Tras dar detalles del mecanismo que se decidió poner en marcha para abastecer al mercado interno con cortes de asado, vacío y matambre a precios más baratos, Schiariti indicó que "lo que se le ofreció al Gobierno es que no hubiera esa parte de la cadena de distribución y poner un camión con 20.000 kilos una o dos veces por semanas en el Mercado Central".
En este sentido, subrayó que "no habrá distribución" y que "sólo se va a poder comprar en el Mercado Central de Buenos Aires y en las fábricas de Santa Fe y Córdoba".
Los tres cortes esenciales no se exportan sino que se comercializan en el mercado interno pero con costos de distribución que hacen que el precio en las carnicerías sea de entre $180 y $220 el kilo, según explicó Schiariti. El plan del Gobierno no baja esos precios sino que carga el costo de la distribución sobre los consumidores, que tendrán que pagar el transporte o ir con sus vehículos particulares al Mercado Central para conseguirlos.
El plan anunciado por el Gobierno para congelar precios no sólo queda en evidencia como una medida con meros objetivos electorales (debido a que su duración será apenas de seis meses) sino que además tampoco garantiza resultados en ese período. En el caso de la carne se trata de una transferencia de costos al usuario (además de que representa menos del 1% de la carne que consumen mensualmente los argentinos) y en lo que respecta al resto de los productos que integran el paquete, los fuertes aumentos previos hicieron que la medida quedara nula desde el inicio.
