El dólar oficial del Banco Nación se sostuvo en torno a los $1.475, sin variaciones, en una rueda marcada por la prudencia de los operadores. La cotización reflejó un mercado contenido, en un contexto donde el Gobierno buscó sostener la calma cambiaria como ancla frente a la recesión y el ajuste en curso.
En el segmento informal, el dólar blue registró una leve baja y se ubicó cerca de los $1.485, achicando marginalmente la brecha con el oficial. El movimiento volvió a mostrar un mercado expectante, atravesado por la caída del consumo y la menor circulación de pesos, más que por una mejora estructural de la economía.
El dólar financiero también operó con escasos cambios. El MEP retrocedió levemente y se mantuvo en torno a los $1.497, mientras que el mayorista acompañó la tendencia con una baja marginal. La dinámica evidenció una estabilidad forzada, sostenida por el freno a la actividad y la pérdida de poder adquisitivo.
En paralelo, el dólar tarjeta permaneció sin cambios en niveles elevados, consolidando el impacto del esquema impositivo sobre el acceso a divisas para consumos en el exterior. En conjunto, las cotizaciones del dólar mostraron una calma aparente que contrastó con el deterioro social y productivo que atraviesa la economía bajo la gestión de Javier Milei.