09.08.2019 / ENTREVISTA PA

Delfina Rossi advirtió que “si gana Mauricio Macri, la devaluación va a ser inminente”

La economista de Agenda Argentina y referente de la agrupación juvenil kirchnerista Buenos 3D analizó como se drenó el último desembolso del FMI en el marco de absoluta dependencia de la economía nacional ante los vaivenes financieros internacionales. Fuga de divisas y bicicleta financiera. De cara a las PASO, remarcó que lo se pone en juego el domingo es el modelo de la especulación financiera o un proyecto de país con crecimiento.

por Walter Sosa




Tres semanas antes de las elecciones Primarias Abiertas Simultaneas y Obligatorias, el Fondo Monetario Internacional realizó su último reembolso: más de 5800 millones de dólares para financiar un clima de estabilidad que no guarda relación con los indicadores de la economía real. El gobierno de Mauricio Macri buscó construirse para si mismo un tubo de oxigeno en lo que para unos considerarían la campaña electoral más cara de la historia.

El esquema de endeudamiento y su consencuente situación de dependencia y debilidad a los vaivenes internacionales se vieron ratificados con la devaluacion del yuan y la consencuente apreciación del dólar.

En estos casi 20 dias se drenaron sumas que corresponden al 47 por ciento de la última transferencia del FMI. La salida es mucho mayor si se toma en cuenta los desembolsos de todo el año.

Consultada por Política Argentina sobre dicha situación, la economista Delfina Rossi remarcó que “si tomamos mayo de 2019 en relación al mismo mes del 2018, se ve que el desembolso del FMI fue de 38.800 millones de dólares y la fuga fue de 27.700 millones”. Es decir, a los ojos de la dirigente kirchnerista, el drenaje de divisas “corresponde a aproximadamente el 70 por ciento del valor total de las transferencias”.

“Ahora bien, de los 16 días últimos ya se fugaron montos equivalentes al 46 por ciento del último desembolso”. Según Rossi, esto responde a la dinámica de liberalización financiera que hizo el gobierno de Mauricio Macri. Desde 2015 no hay regulación para la entrada y salida de capital. Por lo tanto, a su entender, “es normal que en un escenario de inestabilidad global y política local - porque básicamente el proyecto política actual no está poniendo en su agenda el crecimiento económico - que tanto los pequeños tenedores como las grandes empresas busquen refugio en plazas seguras y se vayan al dólar como moneda de atesoramiento”.

“Es algo esperable”, insiste la referente de Buenos Aires 3D para quien “el problema, no obstante, es que se exacerba esta dinámica que propicia la escasez de dólares”.

-    Si vemos el panorama externo, podemos decir que se ratificó la vulnerabilidad del país ane cualquier estornudo financiero internacional. Tomemos la devaluación del Yuan, por ejemplo: hizo que el riesgo país suba y subió el dólar. ¿Cómo vez el factor “dependencia” ante un posible triunfo de Macri y la profundización de su modelo?

“Es preocupante porque el mundo está reconfigurándose. No es que hay una apertura comercial con estabilidad de las principales monedas y con un flujo creciente del comercio internacional. El mundo se encuentra en la reconfiguración de la llamada guerra comercial entre China y Estados Unidos, cuya tensión seguirá, por lo menos, hasta las elecciones norteamericanas del año que viene. Entonces, frente a esta inestabilidad, haber regulado la cuenta y lo movimientos de capitales en Argentina, que es un país que ya tiene por su estructura productiva particular una significativa debilidad, sumarle el coctel de burbuja financiera nos deja patas para arriba”.

“El gobierno de Cambiemos no está dispuesto a poner sobre la mesa cuestiones de regulación de capitales porque eso está en el centro de la génesis política del modelo.

Recordemos sino lo que lo que hizo este gobierno con Alfonso Prat Gay y Federico Sturzenneger: fue sacar regulaciones que estaban desde 2003 y que impedían a los capitales golondrinas venir y obligar a los exportadores a liquidar sus divisas”.

“De ganar, Cambiemos va a poder hacer políticas de ajuste más fuertes. Y en cuanto a la bicicleta financiera no los veo con voluntad de desarmarla porque además hay un conflicto de intereses, ya que están de uno y del otro lado del mostrador”.
“Por eso, el domingo lo que se pone en cuestión es si sigue con la especulación financiera para unos pocos o si se los obliga a reinvertir para que el país crezca y se genere trabajo y producción para las mayorías”.

-    ¿Cómo crees que pueda llegar a reaccionar los mercados financieros con un triunfo de Alberto Fernández?

“Necesitamos como sociedad un poco más de transparencia. Necesitamos saber quiénes son las personas que hacen los movimientos. A veces tenemos devaluaciones de dos pesos que son causa de una gran transacción concentrada. Hay intereses de uno y del otro lado del mostrador, y los actores a veces son los mismos. Esta idea de que los mercados están en contra de un gobierno de Alberto Fernández es un poco abstracta. Habría que preguntarse quienes son los mercados. Puede que haya cierta leve corrida pero la realidad que después de las elecciones, si gana Mauricio Macri, la devaluación va a ser inminente”.

“Además, se le va a disparar la inflación porque tiene `los precios controlados´: su plan alivio fue freezar los principales precios de la económica, freezaron tarifas de servicios públicos, transporte y parte de alimentos de la canasta básica, pero principalmente, freezaron el dólar”.

“En realidad, están dibujando la inflación y ya anunciaron que después de las elecciones van a disparar las tarifas. La realidad, ante la pérdida del poder adquisitivo de los salarios de quienes cobramos en pesos, si gana Macri va a ser dramática porque no está dispuesto a sentarse con el FMI como corresponde”.

En este punto, Delfina remarca una necesidad fundamental. Considera que “lo más importante para generar confianza desde el nuevo proyecto político es saber cómo salir de esta crisis”. Para ella, “no se sale de la crisis con la bicicleta financiera, se sale poniendo limites a los capitales especulativos y tratando de que los capitales argentinos en el exterior vengan a invertir al país”.

“Para eso, en primer lugar tenemos que crecer”, enfatizó aludiendo a que el único proyecto político que puede garantizar crecimiento y desarrollo es el encabezado por Alberto Fernández y Cristina Fernández de Kirchner.