23.08.2019 / Fracaso y daño colectivo

La política deportiva del macrismo se termina sin cumplir una sola promesa de campaña

La noticia de un nuevo aumento en el pack privado de televisación tras el desguace del programa estatal de transmisiones deportivas Fútbol Para Todos expone como el Gobierno de Mauricio Macri no cumplió ni una sola promesa en el ámbito comunicacional y deportivo respecto a lo que proponía en la campaña 2015.

por Leonardo García




En la campaña electoral del año 2015, Mauricio Macri prometía dos cosas trascendentes para su futuro gobierno en temática deportiva. Respetar el derecho de las audiencias en el marco del programa estatal de transmisiones deportivas Fútbol Para Todos y "el regreso de las familias y el público visitante" a los estadios.

Cuatro años después y al borde de perder las elecciones, el Presidente no cumplió ninguna de las dos promesas. Primero desarmó el FpT con la intromisión de la Justicia y la complicidad de Conmebol para intervenir la Asociación mediante una comisión normalizadora que terminó devolviendo el negocio de la televisación del fútbol a los capitales privados.

Todo esto después de modificar la Ley de Servicios Comunicación Audiovisual y vulnerar dos artículos importantes que garantizaban al fútbol argentino como evento de interés relevante y un derecho de las audiencias. Todo esto fue relatado detalladamente por este portal que en su momento se presentó ante la Defensoría del Público como tercero entre partes para acceder a las advertencias realizadas sobre la Secretaría General de la Presidencia y el ENACOM por el desconocimiento de la ley.

Este viernes 23 de agosto se conoció que las empreas privadas que ganaron los derechos de licitación aplicaron un nuevo aumento en el valor del pack fútbol producto de la suba del dólar tras las elecciones primarias. Ahora costará 580 pesos finales por mes, representando un aumento del 13,72% en el 2019.

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En una entrevista televisiva, el entonces candidato de Cambiemos, fue interpelado por un periodista que le consultó si el FPT seguiría vigente, a lo que respóndió: "Sí, pero sin política". "Más vale que está bueno que se pueda ver, pero politizar el fútbol y haber ahondado los problemas de mas violencia, con más barras y más clubes fundidos no ha sido nada bueno", decía el Macri del 2015.

Este autor ya ha profundizado en la escandalosa intromisión del Gobierno de Macri en el fútbol argentino, pero sirve recordar que el Presidente prometía cosas en campaña que ni siquiera las creía ni las había demostrado en su gestión. No solo acusaba de electoralistas algunas medidas que Juan Manuel Lugones volvió a replicar para ganar adhesiones electorales en la PBA sino que fue el mismo el que en 2017 pidió que extiendan la gratuidad del fútbol para evitar un malestar electoral en un contexto donde todo aumentaba.

"¿Qué ha cambiado? ¿Está más segura la Argentina? ¿Hay más presencia policial? No. No siento que se haya mejorado en absoluto para darle más seguridad a la gente", reprochaba Macri a días de la elección que lo llevaría al ballotage en octubre del 2015.

Mauricio Macri, es el mismo que guarda en su haber la recordada frase: "Hagamos una campaña todos los hinchas de Boca de que no vamos a una cancha de visitante. Vamos a ver que pasa, se muere el fútbol argentino, nosotros llenamos nuestra cancha y los demás que se mueran", declarada en los ´90. Todo muy acorde a su avanzada con las Sociedades Anónimas Deportivas.

Otro hecho que sucedió en las canchas durante la gestión Macri fue la censura del fútbol privado al hit del verano 2018. El clásico MMLPQTP que comenzó en la cancha de San Lorenzo de Almagro. El Presidente en ese momento decía que "no usamos el fútbol para perseguir" desconociendo que la Bonarense se metió a reprimir en una tribuna de Independiente por su odio visceral sobre los Moyano. 

Para finalizar no hace falta ni recordar el papelón más grande de la historia del fútbol argentino cuando las fuerzas de Seguridad de la Ciudad de Buenos Aires que debía comandar el ultramacrista Horacio Rodríguez Larreta y las nacionales de Patricia Bullrich no pudieron organizar bien el recorrido de un micro con deportistas profesionales.

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