Nada más y nada menos que
Juan Román Riquelme, el máximo ídolo de la historia de Boca Juniors, rompió el silencio tras los rumores periodísticos que en las últimas semanas lo ligaban al oficialismo del club y parece haber lanzado una jugada política que lo pone a tiro de ser presidente de la entidad, recuerda la estrategia del Frente de Todos a nivel nacional y hace temblar al macrismo en el xeneize.
Es que el ex Diez xeneize y de la Selección pidió la unidad en Boca de cara a las elecciones del 8 de diciembre y afirmó:
"Si hay unidad, yo puedo pensar en ser presidente o lo que sea".
"
Si me llaman, los voy a atender a todos. Después pienso mucho. Pienso que es el momento que estén todos juntos, que al club se lo quiere de verdad. Somos hinchas de Boca. No de una lista o agrupación", afirmó en una entrevista que dio a Fox Sports.
En ese sentido, explicó: “Me tienen cansado con eso de ‘sos oficialista’ o ‘sos opositor’. ¡Yo soy de Boca! Amamos a nuestro club. Tenemos que estar todos juntos. Si hay unión yo puedo pensar en ser presidente; en ser lo que sea”.
“Yo soy de Boca. Somos muchos los bosteros (...) Es momento que dejen de pelearse por el poder, que dejen los egos, las diferencias, los intereses. T
enemos que estar todos juntos. Si queremos a nuestro club de verdad, tenemos que estar todos juntos”, puntualizó.
Respecto de los rumores que lo fueron ligando a espacios políticos del club, advirtió: “Yo escucho cuando hablan por la televisión o la radio cada uno de ellos; los que se están por postular.
Me pone contento que digan que quieren estar conmigo. Pero yo no soy el caballito de batalla de ninguno, no soy el as bajo la manga de ninguno. Si me llaman voy a atender a todos como hago siempre y después pienso mucho. Pero es momento que estemos todos juntos”.
El pasado 5 de noviembre se abrió la postulación de listas que se cerrará el próximo 20 de noviembre. Quienes pelearía, por ahora, por la presidencia son
Christian Gribaudo del angelicismo,
Jorge Amor Ameal,
José Beraldi y
Víctor Santamaría, como principales referentes de la oposición. "Me tienen cansado si soy 'oficialista', 'opositor', soy de Boca, somos todos bosteros y tenemos que estar todos juntos", reclamó Riquelme.
"Nuestro club se llama Club Atlético Boca Juniors, el club más grande del mundo para mí, el más grande del país sin duda. Todos ellos estuvieron juntos. No digo cosas raras", agregó.
El ex enganche sostuvo que no le "parece relevante quién va a ser presidente" y que "todos" deben "ayudar". "Es un club de fútbol. Me molesta cuando veo que se están peleando por el poder. Para algunos, es política. Para mí, Boca es un club atlético. Es Club Atlético Boca Juniors, no Club Atlético Oficialismo o Club Atlético Oposición. Es un club de fútbol", lanzó Riquelme.
“Lo que yo digo es un deseo mío. Tendrían que demostrar que pueden estar todos juntos, porque ya estuvieron todos juntos. Si me pongo a pensar. ¿Angelici qué es? Oficialismo. ¿Gribaudo? Oficialismo. ¿Crespi? Oficialismo. ¿Beraldi con quién estuvo? Con Macri. ¿Royco hasta hace cinco meses con quién estuvo? ¿Ameal fue vicepresidente de Pompilio y era de quién? Oficialismo ¿Y fue presidente cuando tuvimos la desgracias de Pompilio siendo presidente de quién? Del oficialismo. ¡Entonces pueden estar todos juntos!”.
“Yo ya he hablado con los que están hoy postulándose”, anunció y dejó la propuesta flotando en el aire.
Según pudo saber Política Argentina, en los espacios opositores observan la jugada en la línea de búsqueda de la unidad opositora por la que Riquelme y su entorno presionan y reclaman desde hace tiempo.
Si bien hasta el momento no se pudo lograr, interpretan que la apertura a un consenso que incluya al oficialismo podría ser más efectiva como mecanismo de presión, ya que el angelicismo no estaría en condiciones de ser competitivo contra la oposición unida con Riquelme a un paso de jugar en política y con su partido despedida a la vuelta de la esquina. Y encima tras las eliminación de Boca ante River por la Copa Libertadores.
En esa línea, si el macrismo xeneize aceptase participar de una unidad sería con poco margen para reclamar conducir y la abdicación de Gribaudo parecería lo más probable.
"No tendrían margen para reclamar mucho", respondieron fuentes de la oposición a este medio.
El proceso de unidad al que el peronismo y sus aliados llegaron para construir el Frente de Todos tuvo gestos similares, con la confluencia del kirchnerismo, el PJ, el massismo y el resto de las agrupaciones del progresismo que acompañó, hasta 2015, al Frente para la Victoria. Obviamente, en ese caso solamente Cambiemos quedó fuera de ese reagrupamiento. Resta saberse qué pasará en el caso de Boca, aunque la ausencia de coincidencias entre oposición y oficialismo traza un panorama similar al de la política nacional.
