26.12.2019 / Polémica

La Conferencia Episcopal advirtió al Gobierno por el uso de cianuro en Mendoza para explotación minera

A través de un comunicado expresaron su preocupación por la modificación de la ley provincial 7722 y manifestaron que "el agua de Mendoza no se negocia" ya que "el territorio es vida, se cuida y se defiende". El Equipo Nacional de Pastoral Aborigen le piden cambio de parecer al radical Rodolfo Suarez y reclaman la intervención del Presidente.




Desde la Conferencia Episcopal Argentina se sumaron al mensaje del Equipo Nacional de Pastoral Aborigen donde en una larga carta le exigen al gobernador radical de Mendoza Rodolfo Suárez que de marcha atrás con la modificación de la ley 7722 y le sugieren al Presidente Alberto Fernández que intervenga.

"Esta reforma, impulsada por el gobernador Rodolfo Suárez, aprobada el viernes con amplio apoyo de sectores de la Unión Cívica Radical y el Partido Justicialista - con el aval del presidente Alberto Fernández- y promulgada el último martes, autoriza a que las empresas avacen e incidan negativamente en la provincia, significando un tremendo perjuicio ambiental en la región, donde viven comunidades campesinas y sobretodo los territorios del Pueblo Huarpe", señalaron en el comunicado.

La carta llega después de que Suárez ignore la misiva enviada por el arzobispo de Mendoza Marcelo Daniel Colombo para "que no promulgue las modificaciones" a la norma y aseguró que "para estos proyectos mineros, como para todo cuanto compromete la vida y la salud de los habitantes y la Casa común, hace falta la licencia social, se requiere un consenso específico y explícito", ya que de otra manera "se pone en riesgo la amistad social, y se apuran definiciones que necesitan tiempo para ser discernidas y decididas".

Desde la Conferencia Episcopal Argentina insisten al gobernador radical a "escuchar el clamor de su pueblo, a no avanzar en la reglamentación de la modificación legislativa y a abrir un debate serio, que considere todas las voces, para no provocar un nuevo e irreversible daño a nuestra Casa común".