19.09.2025 / EN CÓRDOBA

Tremendo: Milei se comparó con De la Rúa y embistió contra Schiaretti ante un auditorio sin euforia


En la Bolsa de Comercio de Córdoba, Javier Milei sostuvo que “no van a poder frenar el cambio”, pronosticó que la inflación “será un mal recuerdo” recién en el segundo semestre de 2026 y cargó contra Juan Schiaretti, a quien acusó de promover un déficit de “7 puntos del PBI”. El clima en el salón fue de abatimiento y aplausos tibios.





El presidente Javier Milei llevó su ofensiva al plano de la provincia de Córdoba: “Resulta increíble alguna propuesta, se supone que cuando uno pasa por la administración pública debió aprender qué es una restricción presupuestaria”. Luego apuntó: “¿Con qué lo va a financiar? Con emisión, con deuda en este contexto o con impuestos. Por cada punto de PBI necesita 3 puntos de IVA, le preguntaría a Schiaretti si está pensando en llevar el IVA al 41%”, y al pasar lo calificó de “gastomaníaco”. El acompañamiento fue escaso y los pocos aplausos los inició Manuel Tagle, titular de la Bolsa: “Si se consolida este plan, la economía de Argentina va a volar”, vaticinó.

Según detalló LPO, Milei eligió la autocontradicción del espejo para compararse con Fernando De la Rúa y, a la vez, reivindicar su hoja de ruta. “Parece que encontró la máquina de la prosperidad”, dijo sobre su propio gobierno, al tiempo que celebró haber “sacado de la pobreza” a 12 millones de personas y a 6 millones de la indigencia. En esa línea aseguró que destruyó “la falacia del pass through” y citó una tesis académica para afirmar que la inflación “será un mal recuerdo” en el segundo semestre de 2026 si “Argentina siguiera con esta política”.

El Presidente volvió sobre su libreto de “equilibrio fiscal o nada”: “De 200 países, sólo 5 tienen equilibrio fiscal y nosotros somos uno de ellos”. Denunció “pánico” en “el partido del Estado”, pidió “pintar a Argentina de violeta” el 26 de octubre y sostuvo que “los niveles de consumo están en los máximos históricos”. También remarcó que “nos dieron las leyes porque creían que iba a salir mal”, y convocó a no escuchar “la receta que fracasó 100 años”.

Como corolario, prometió reformas laboral y tributaria y trazó un paralelo con la caída de la Alianza: “Cuando empezaron a torpedear a De la Rúa fue porque quiso hacer la reforma laboral. No vaya a ser que sean los mismos. No van a poder frenar el cambio”. Entre empresarios predominó la preocupación y el semblante fue de velorio: un Presidente en clave autocelebratoria se topó con una platea que pidió resultados y menos épica.