En una rueda atravesada por la incertidumbre electoral, el “buen recibimiento inicial” al swap se diluyó y “los ADRs se dan vuelta y entran en terreno rojo”. El movimiento se vio desde el premarket de Wall Street y terminó de consolidarse con ventas en títulos soberanos en moneda dura. Entre los Globales, el 2041 retrocedió hasta 0,2%, y entre los Bonares las pérdidas resultaron más pronunciadas, con el Bonar 2041 cayendo 4,1%.
El frente cambiario marcó el pulso del día. “El dólar no cede presión a pesar de la firma del swap con EEUU”, y quedó “a solo 1,1% del techo de la banda”. El mercado se movió “en modo electoral”: “el swap no calma los ánimos, el dólar sube, mientras los bonos y acciones bajan”. Desde el equipo de Research de Puente destacaron que el anuncio del swap “es más que simbólico”, ya que “se concreta el acuerdo previo a las elecciones y se disipan las dudas de que era condicional a su resultado”.
La presión por cobertura cambiaria y la cautela antes de los comicios sostuvieron el riesgo país “en torno a los 1.000 puntos básicos”, con un último dato de 1.089 al viernes 20. En renta variable, los ADRs cedieron hasta 4,2% encabezados por Grupo Supervielle, seguidos por Pampa Energía (-3,2%) y Transportadora de Gas del Sur (-3,1%), mientras Telecom avanzó 0,3%. En la plaza local, el S&P Merval bajó 0,9% a 1.971.419,10 puntos y su versión en dólares retrocedió 1,4% a 1.270,74 puntos.
El tablero quedó dominado por el rojo: Edenor cayó 3,5%, TGS 2,3% y Pampa 2,4%, con Aluar como excepción al subir 0,8%. En clave política, el “círculo rojo” leyó que el swap ordenó expectativas de muy corto plazo, pero no alcanzó para despejar la volatilidad de una semana en la que el mercado privilegió liquidez y cobertura, a la espera de definiciones que devuelvan certidumbre macro y rumbo productivo.