Hernán Lacunza fue el reemplazante de Nicolás Dujovne tras la brutal devaluación de agosto luego de que el Gobierno pierda en las elecciones primarias. Si se cuenta a Alfonso Prat Gay, el actual ministro de Hacienda es el tercera en la lista de los que manejaron la eocnomía en tiempos de Mauricio Macri y a modo de despedida le tocó hacer un balance de gestión.
"No es un momento para polemizar.
No hay tanto debate posible en materia de cuál es la realidad económica porque todos los números son verdaderos, confiables.
Los resultados no fueron buenos en lo que hace al bienestar cotidiano", comentó en una entrevista con el programa "De Acá en Más".
El ministro encargado de volver a restaurar el cepo y de aplicar la friolera suma de 200 dólares por mes para atesoramiento reconoció que fue apresurado el levantamiento del cepo cuando ganó Macri.
"¿Se levantó prematuramente (cepo) al principio de la gestión? Posiblemente. Antes de tener una cuenta de capital regulada hay que tener los equilibrios macro económicos garantizados", señaló.
Entrevistado por la periodista María O´Donnel, Lacunza dijo que hoy a diferencia del 2015 "hay índices que mejoraron como el déficit fiscal, tenemos un tipo de cambio competitivo, las tarifas estaban atrasadas".
"El resultado de estos años fue herencia, mala suerte y errores propios", remató.
"La deuda no es imposible de pagar. Hay un tema de liquidez. Todos los vencimientos se están pagando cash,
el crédito del Fondo fue para pagar deuda, no se fue.
No sé cuál es la fantasía de la fuga de capitales", analizó y negó que se "hayan fugado un FMI".
Por último blanqueó que "sin el préstamo del FMI hubieramos tocado fondo" y que una de las cosas que tendrían que haber hecho era "haber desalentado un ingreso masivo de capitales especulativos, una regulación prudencial". También terminó reconociendo que "no fuimos capaces de construir un sistema robusto frente a contingencias".