15.10.2020 / Economía

El FMI, a favor del aporte solidario de los más ricos: "Hay que evaluar impuestos más altos para los más acaudalados"

Mientras en Argentina el macrismo se opone al proyecto de ley que pretende gravar a las grandes fortunas de manera extraordinaria, el director del Departamento de Finanzas Públicas del organismo pidió "medidas para mejorar el cumplimiento tributario" y llamó abiertamente a los Gobiernos a aplicar "impuestos más altos" a los más ricos y "empresas más rentables".




Parece ser, y no es un chiste, que el Fondo Monetario Internacional tiene un espíritu más solidario en plena pandemia del coronavirus que Juntos por el Cambio en la Argentina: el organismo de crédito multilateral pidió "evaluar impuestos más altos para los más acaudalados y las empresas más rentables", tal como el proyecto de ley presentado por el Frente de Todos para gravar con un aporte extraordinario a los grandes patrimonios que el macrismo rechaza con vehemencia

“Los gobiernos deben tomar medidas para mejorar el cumplimiento tributario y evaluar la aplicación de impuestos más altos para los grupos más acaudalados y las empresas más rentables. Los ingresos resultantes contribuirían a pagar servicios críticos, como las redes de salud y de protección social, en una crisis que ha afectado de manera desproporcionada a los segmentos más pobres de la sociedad”, indicó este miércoles Vitor Gaspar, el director del Departamento de Finanzas Públicas del FMI.

En cuanto a una reforma en el sistema fiscal, Gaspar admitió que no es fácil llevarla a cabo en este contexto, pero que debe avanzarse en ese camino: “Tomará su tiempo, pero creemos que es importante ofrecer ahora una guía sobre lo que va a ocurrir en el medio y largo plazo, anunciándose ahora las medidas”.

Para el corto plazo, la gran preocupación del Fondo es que los países no dejen caer “demasiado pronto” las medidas de apoyo fiscal. Para Gaspar, el déficit “no es el mayor riesgo ahora; el apoyo fiscal debe mantenerse, al menos, en 2021, con la salud y la educación como prioridad”.

“Lo que más nos preocupa es que se retiren los apoyos de manera prematura: podría provocar una ola de quiebras y un gran aumento del desempleo. Volvemos a decirles a los Gobiernos que no deben recortar esos salvavidas prematuramente”, aseguró en ese mismo sentido la directora del Fondo, Kristalina Georgieva. A futuro, la funcionaria llamó a los Gobiernos a “adaptar el sistema fiscal para adaptarlo al mundo del siglo XXI y hacerlo más equitativo”.

En Argentina, el establishment local y Juntos por el Cambio en su totalidad rechazan el proyecto de ley presentado por el Frente de Todos para gravar con un aporte extraordinario a los grandes patrimonios. La iniciativa, de sancionarse, alcanzará a las 9300 personas físicas más ricas del país, apenas el 1% de los contribuyentes que presentan declaración del impuesto a los Bienes Personales.

La recaudación estimada a partir del aporte es de $307 mil millones, lo cual equivale al 1% del PBI argentino. A pesar de la innegable progresividad de la medida, que supone una mejora de los ingresos para los sectores que más consumen y que por lo tanto más traccionan a la economía, el macrismo duro cataloga al proyecto como "anti inversión".  

No es la primera vez que el Fondo se manifiesta a favor de aportes solidarios de los más ricos, ya que en abril el organismo había pedido un mecanismo para obtener recursos y hacer frente a la crisis, el Fondo había planteado a los gobiernos crear un impuesto a la riqueza, como una tasa solidaria. En su texto, el FMI señalaba la necesidad de “considerar un aumento de las tasas en los tramos superiores del impuesto sobre la renta”, es decir, a los más acaudalados o grandes fortunas, a fin de asegurar la recaudación tributaria.