El gobernador de la provincia de Buenos Aires, Axel Kicillof, mantuvo un encuentro con referentes de la medicina prepaga y de las obras sociales en el marco de la profundización de contagios de la segunda ola de coronavirus. El mandatario provincial se mostró preocupado por los altos niveles de ocupación de camas de terapia intensiva y con la intención de avanzar en una mayor coordinación de los sistemas de salud.
En este marco, sostuvo: “Repetimos nuestra disposición de que el sistema público o privado bonaerense reciba pacientes de la Ciudad”. “Es necesario trabajar en conjunto entre los sistemas públicos y privados de la Provincia, la Ciudad y la Nación”, agregó.
En este contexto, sentenció:
"No quedan camas”. Y agregó: “Estamos tratando de mejorar los mecanismos de coordinación para que el sistema actúe coordinadamente, hemos buscado soluciones donde la Provincia pueda participar siendo ayudada por el sector prepago de argentina".
La advertencia más fuerte del mandatario sobre el colapso del sistema sanitario en la Ciudad de Buenos Aires llegó la semana pasada al anunciar cómo se adaptarían las nuevas restricciones para hacer frente a la segunda ola en el territorio bonaerense.
“Cuando el jefe de Gobierno porteño (Horacio Rodríguez Larreta) habla de la ocupación de camas no incluye al sector privado, cuando el 80% de los porteños se atiende ahí. Clínicas de la provincia que nunca atendieron a pacientes de Capital recibieron a los que se quedaron sin camas”, puntualizó.
“Los casos crecen, hay más contagios y más muertos. Hay algunos que se preocupan por su baldosa”, expresó.