30.11.2021 / Mejorar la educación

Unesco: en 2019 Argentina tuvo el peor resultado de su historia en desempeño educativo

El país consiguió un puntaje por debajo del promedio regional y de sus propios resultados previos en las pruebas de desempeño educativo 2019 de UNESCO, último de los cuatro años de gestión de Cambiemos. En el Ministerio de Educación expresaron su "preocupación" y recordaron el desfinanciamiento de ese período.




Tras el 2020 pandémico que generó en la Argentina una discusión acerca de si fue acertada o no la vuelta gradual a la presencialidad escolar determinada por el Gobierno nacional ante la pandemia y cuáles serán las consecuencias en los chicos, se conocieron los resultados de las pruebas de desempeño educativo ERCE 2019 administradas por UNESCO-LLECE y arrojaron que en el último de los cuatro años de gestión de Mauricio Macri la Argentina obtuvo un puntaje peor que el promedio regional y que el obtenido por el país en 2006 y 2013

Lo que se destaca de este desempeño en las asignaturas de Lengua, Matemática y Ciencias Sociales de chicas y chicos de terceros y sexto grado de primaria en comparación a 16 países de América Latina y el Caribe es que es el resultado más bajo a nivel regional.

Además, lo sucedido en el último año del gobierno de Cambiemos, actualmente Juntos por el Cambio, también contrasta con las pruebas que el Estudio Regional Comparativo y Explicativo (ERCE) había realizado en 2006 y 2013.

Es que tanto en 2006, cuando se acerca el final del gobierno de Néstor Kirchner, como en 2013, tras todo el mandato del mencionado ex presidente, los primeros cuatro años de Cristina Fernández de Kirchner y 24 meses de su segundo período, Argentina presentaba el mismo promedio o incluso superaba a la mayoría de los países de la región.

En cambio, en 2019 tanto en lectura como en matemática de tercero, los chicos evaluados culminaron ocho puntos debajo del promedio regional. En la primera asignatura totalizaron 689 puntos y en la segunda 690. 

Por otro lado, los estudiantes de sexto grado alcanzaron un promedio general de lectura y llegaron a 698 puntos, pero en matemática quedaron siete puntos abajo del promedio regional. Los números más graves se registraron en ciencias sociales, donde el país quedó 20 puntos por debajo del resto de los 15 países. 

El ERCE es una prueba representativa que lleva adelante el Laboratorio Latinoamericano de Evaluación de la Calidad de la Educación (LLECE) de la UNESCO. En su última versión, cubrió a más de 4.500 escuelas y 202.000 chicos, que representan a casi 20 millones de estudiantes en sistemas educativos que albergan un universo total de 150 millones. Además de Argentina, participaron Brasil, Colombia, Costa Rica, Cuba, Ecuador, El Salvador, Guatemala, Honduras, México, Nicaragua, Panamá, Paraguay, Perú, República Dominicana y Uruguay.


EL ANÁLISIS DEL MINISTERIO DE EDUCACIÓN

La definición de Jaime Perczyk, el titular de la cartera educativa de la Nación, durante la presentación de los resultados fue contundente: “Desde el 93, cuando Argentina empezó a tomar pruebas estandarizadas, es la mayor caída con respecto a otros países, pero sobre todo con respecto a nosotros mismos. En 2013, si bien hubo una pequeña caída respecto a los demás, Argentina subió sus puntajes en las áreas evaluadas. Ahora nos encontramos con un panorama muy adverso, que buscaremos revertir”.

En ese sentido, el ministro de Educación sugirió que la posición relativa de Argentina es muy mala y que, de realizarse un ranking - que no se hace oficialmente - al interior de Sudamérica el país se ubicaría en el anteúltimo lugar, solo por encima de Paraguay y por debajo de Brasil, Uruguay, Colombia, Perú y Ecuador.

A la hora de analizar las razones de estos resultados, Perczyk remarcó datos que surgen de lo sucedido durante la gestión de Mauricio Macri: hubo una “caída abrupta” de la inversión por parte del Estado Nacional entre 2015 y 2019, año en que se tomó la evaluación y que fue el último del período de gestión de Cambiemos. 

“La inversión educativa del Estado Nacional en Argentina experimentó un notable retroceso en ese periodo reciente. Mientras que entre 2003 y 2015 el gasto consolidado del Estado Nacional en educación aumentó en promedio un 2,7% del PBI, pasando del 3,4% al 6,1% del producto, entre 2015 y 2019 cayó en más de 1,3 puntos del PBI cerrando en 4,8%”, explicaron en el Palacio Sarmiento.

Además, añadieron a la explicación los altos índices de cobertura que tiene la Argentina. Es uno de los sistemas educativos de mayor tasa de inclusión en la región: en la primaria, antes de la pandemia, casi el 100% de los chicos estaban en la escuela. “Tenemos que lograr que esa inclusión se traduzca también en calidad”, señalaron.

Consultado acerca de cuál es la forma de superar esta problemática, Perczyk destacó que el camino inicia en la reinversión en forma “continuada y constante por encima de la inflación proyectada” y agregó una serie de factores necesarios: proveer de material didáctico a los alumnos que más lo necesiten, mejorar la capacitación docente, recuperar el programa Aprender Conectados y puso especial énfasis -como viene diciendo- en garantizar que los chicos regresen a la escuela tras la desvinculación producto de la suspensión de las clases presenciales ante la pandemia