17.08.2022 / Según un estudio

Argentina es uno de los mejores países del mundo para sobrevivir ante una guerra nuclear

De acuerdo con una investigación publicada en la revista científica británica Nature Food, junto con Australia y una franja de África nuestro país es uno de los mejores para sobrevivir en una presunta guerra entre Estados Unidos y Rusia.





Argentina, Australia y una franja de África serían son los únicos territorios con esperanzas de sobrevivir a una presunta guerra nuclear entre Estados Unidos y Rusia por lo menos una década después de haber iniciado el conflicto, así lo estableció una reciente investigación publicada en la revista científica británica Nature Food y difundida ayer por el diario estadounidense The Times.
En el estudio los científicos buscaron prever cuál podría ser el resultado en materia de seguridad alimentaria ante un conflicto atómico, tras los incendios masivos iniciados por el estallido de la presunta guerra nuclear y el hollín existente, que a su vez, llegaría a tapar la  iluminación del sol. “Su conclusión es que incluso si evitas estar entre las muertes iniciales, el efecto indirecto del conflicto significa que cinco mil millones de personas podrían morir de hambre en todo el mundo en los años inmediatamente posteriores al ataque”, indicó el medio estadounidense.

Especificamente, una guerra nuclear provocaría incendios masivos, las cenizas distribuidas en la atmósfera bloquearían el Sol y el 75 % de la población mundial podría morir de hambre. El estudio reveló que en ese escenario Argentina, Australia y una franja de África tienen mejores posibilidades de que su población sobreviva, incluso durante una década después de la lluvia radiactiva.

Los científicos detallaron que una guerra nuclear podría generar interrupciones "catastróficas" en la cría de animales, la pesca y los cultivos en todo el mundo dentro de los cuatro años posteriores. “Todo el mundo entiende que el efecto directo de la guerra nuclear sería terrible, como vimos en Hiroshima y Nagasaki”, le dijo el profesor Alan Robock, de la Universidad de Rutgers en Nueva Jersey, a The Times. “Nuestro trabajo muestra que más de diez veces más de personas podrían morir en el resto del mundo debido a los impactos sobre el clima y la agricultura”, señaló el especialista.

Para llegar a las estimaciones, a través de simulaciones por computadora,  los investigadores ignoraron las muertes iniciales de las explosiones nucleares y, en cambio, insertaron modelos de las consecuencias para la agricultura ante la caída de la luz solar y la temperatura tras los incendios.

“Por primera vez, hemos podido utilizar modelos climáticos y de cultivo modernos para cuantificar los efectos de cada país en función de cuál es su muerte, cuánto importan y exportan, y cómo cambiaría el clima y afectaría a cada cultivo por separado”, detalló Robock.

Según explicó el coautor del estudio, Alan Robock, tanto Argentina, Australia y  una franja de África central, cultivan productos más resistentes en grandes cantidades, como el trigo, lo que les da ventaja sobre el resto.

“Todavía habría suficiente producción nacional para ellos, pero puedes imaginar que habrá flotillas de refugiados hambrientos de Asia en su camino”, agregó Robock en su análisis. “La amenaza de usar armas nucleares para disuadir un ataque es una bomba suicida. Porque si los usas, todos en tu país morirán de hambre”, completó el profesor de la Universidad de Rutgers en Nueva Jersey.