El ministro Federico Sturzenegger confirmó que no pedirá la renovación de las facultades delegadas que el Congreso otorgó al inicio del mandato de Javier Milei, y subrayó que “cuando venzan esos días va a estar hecho todo lo que podíamos hacer por facultades delegadas” para que su equipo “estuviera muy consciente del tiempo que teníamos”.
En los siguientes meses, la cartera que lidera impulsará “un movimiento bastante importante” de reorganización estatal mediante decretos, con fusiones, cierres y reestructuraciones de organismos. El ministro recordó la consigna presidencial: “el achicamiento del Estado no es impopular, es popular”.
Además, Sturzenegger vinculó el uso de las facultades delegadas con el calendario electoral. Destacó la victoria de Manuel Adorni en la Ciudad de Buenos Aires y señaló que el respaldo ciudadano de La Libertad Avanza puede abrir “otra ventana, que es la de la reformulación de leyes para la cual no teníamos facultades delegadas”.
El ministro confió en que “cuando la inflación desaparezca de Argentina, y pienso que se va a dar antes de lo que la gente piensa, nos va a obligar a replantearnos todas las rigideces que tiene nuestro mercado laboral”, y adelantó que esas discusiones exigirán al Congreso “tener una discusión” sobre nuevas reformas.
Por último, defendió la reciente baja de aranceles a la importación de celulares, consolas y televisores, pese a la preocupación por posibles despidos en Tierra del Fuego. Sostuvo que la medida “va a crear muchísimos empleos” y destacó el potencial de desarrollo de la provincia, con recursos para ser “una potencia pesquera” y un polo petroquímico de primera línea.