La investigación sobre el derrumbe de la criptomoneda $LIBRA sumó un capítulo decisivo con el testimonio de Hayden Davis ante el tribunal federal de Nueva York. El empresario, señalado como el cerebro del proyecto, responsabilizó directamente al presidente Javier Milei por el desplome que afectó a inversores de todo el mundo.
Davis negó rotundamente que $LIBRA fuera una estafa y explicó que la iniciativa nació para apoyar a las pequeñas empresas e impulsar proyectos educativos en la Argentina. Según su relato, el quiebre se produjo cuando el mandatario ordenó eliminar el posteo en la red social X con el que había promovido el token.
“La eliminación del posteo alimentó las sospechas de fraude y destruyó la confianza en $LIBRA”, afirmó Davis ante el tribunal.
El empresario también se refirió al papel de los llamados “snipers”, inversores que adquirieron grandes cantidades de $LIBRA en el momento del lanzamiento y vendieron rápidamente para obtener ganancias. Davis negó cualquier vínculo con estos operadores y sostuvo que “no tenía conocimiento previo de su existencia ni relación con ellos”, buscando así despegarse de las acusaciones de manipulación del mercado.
El testimonio resultó especialmente incómodo para Milei, a quien Davis señaló como pieza clave en el lanzamiento inicial y cuyo repentino retiro del apoyo precipitó el colapso. “No sé por qué lo hizo”, insistió el empresario, dejando en suspenso las razones detrás de la decisión presidencial y reavivando el debate sobre la responsabilidad política y ética del mandatario frente a miles de pequeños inversores.
Mientras tanto, la justicia estadounidense mantiene congelados casi 60 millones de dólares en criptoactivos vinculados al proyecto y sigue analizando si existió delito en la operatoria de $LIBRA, incluyendo posible manipulación de mercado o uso de información privilegiada. Davis insiste en su inocencia y atribuye el fracaso a factores ajenos a su control, en especial a la retirada del respaldo de Milei.