23.03.2017 / ÍNDICE DE LA UNIVERSIDAD DI TELLA

Mejora la confianza en la economía, pero sólo para los consumidores de altos ingresos

La percepción de los consumidores mejoró en promedio un 0,7% en marzo con respecto a febrero. Sin embargo, el resultado difiere según la distribución por nivel de gastos: mientras que para los compradores más acaudalados subió un 9,1%, para los más pobres se derrumbó un 4,4%.




La confianza de los consumidores argentinos en la economía y con respecto a su situación personal mejoró en promedio un 0,7% en marzo respecto de febrero. Sin embargo, el análisis desagregado de ese indicador señala que la mejora en la percepción sólo se dio para los consumidores de altos ingresos. Para los de menores recursos, esa confianza continuó desmoronándose. En tanto, los números totales siguen ubicándose por debajo de los registros del año pasado.

De acuerdo a la distribución por nivel de gastos, el informe refleja que la confianza de los consumidores cayó 4,4% para el sector de los encuestados con menores ingresos y aumentó 9,1% para el sector de los encuestados con mayores ingresos, siempre respecto al mes anterior.

Esa diferencia en la percepción de la situación económica también varió según la ubicación geográfica. Así, mientras que la confianza mejoró en la Ciudad de Buenos Aires y las capitales y grandes urbes, se retrajo en el Conurbano bonaerense. En concreto, aumentó 4,7% respecto de febrero en CABA y 4,1% en el interior del país, mientras cayó 2,9% en el Gran Buenos Aires.

El índice de Confianza de los Consumidores (ICC) depende del Centro de Investigación en Finanzas de la Universidad Torcuato Di Tella. Según su último informe, el IPP se ubicó en marzo un 15% por debajo del mismo mes de 2016. En promedio, la mejora en la confianza apuntó al corto y mediano plazo (2,2%), al tiempo que en relación a la macroeconomía esa suba fue de sólo 0.4%.

Los datos en materia de confianza, que marcan una diferencia entre los consumidores de mayores y menores ingresos, coinciden con recientes informes que revelan una ampliación de la brecha entre los que más y menos tienen. Así, de acuerdo a un informe del Centro de Estudios Atenea, durante el segundo y el tercer trimestre de 2016 el ingreso real de los que menos tienen cayó un 4%. Al mismo tiempo, para los que más tienen subió un 9,4%.