23.05.2017 / ¿Cisma en el oficialismo?

Tensión en Cambiemos tras los disparos de la aliada Carrió al Gobierno de Macri

El "lobby" macrista para ocultar información sobre casos de corrupción denunciado por "Lilita" y su posterior exigencia a Macri de que la defienda generó un maremoto en el Gobierno. Funcionarios de primera línea le respondieron, pero terminaron cruzándose entre sí: Michetti y Frigerio dispararon contra la legisladora chaqueña, Garavano se puso en el medio, pero Larreta la bancó.

por Marcelo Rielo



Cada vez que la co-fundadaora de la alianza oficialista Elisa Carrió abre la boca o presiona "twittear" en la famosa red social, algo cambia -valga la redundancia- en Cambiemos y los acuerdos tiemblan. En este caso, la diputada nacional primero disparó que "algunas personas del Gobierno cuidan" al exministro de Planificación, Julio De Vido, por temor a ser salpicados en causas de corrupción, y luego le exigió al propio presidente Mauricio Macri que la defienda, ya que es ella la que que "siempre pone la cara" por él. La canilla abierta por la legisladora chaqueña tuvo consecuencias. 

Por un lado, la vicepresidenta Gabriela Michetti y el ministro de Interior, Rogelio Frigerio, salieron a bancar al Gobierno y cruzaron fuerte a "Lilita". En una posición intermedia, el titular de la cartera de Justicia, Germán Garavano, ensayó una "ancha avenida del medio" macrista e intentó aunar posturas. Pero por otro carril se ubicó el jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, que elogió y defendió a la referente de la Coalición Cívica (CC).

La primera avanzada la propinó Michetti ayer, cuando salió al cruce de la diputada nacional y negó que desde el oficialismo pretendan "proteger a alguien porque tenga un parentesco con un funcionario", en clara alusión a los fuertes vínculos de Ángelo Calcaterra, el primo de Macri, con las obra pública objeto de investigaciones sobre casos de corrupción a los que habría aludido "Lilita". 



"No vamos a proteger a alguien porque tenga un parentesco con un funcionario", disparó la Videpresidenta en diálogo con radio la Red en respuesta a las declaraciones de la legisladora por la CC, que había asegurado que a De Vido "lo cuidan porque puede hablar y comprometer a empresarios, banqueros, jueces, miembros del Tribunal Supremo, a todos, y esto incluye a algunas personas del Gobierno".

A partir de eso, Michetti recogió el guante y desafió a "Lilita": "Si siente eso, es grave y lo tiene que poner sobre la mesa para discutirlo".

En la misma línea se posicionó hoy Frigerio, que en declaraciones a la misma radio que Michetti aseguró que Carrió "sabe" que Macri "no va a apañar a nadie de su Gobierno si hay un hecho delictivo" y le lanzó un chicana explicativa: sostuvo que cuando se trata de denuncias "hay que preguntarle a la justicia" y no al Poder Ejecutivo.

"Si Lilita tiene información sobre el encubrimiento de un funcionario del gobierno pasado por parte de funcionarios de este gobierno lo tiene que decir como lo ha dicho siempre. Nunca ha tenido trabas para hablar o para acusar a alguien", retrucó el poderoso ministro, en quien el Presidente delega importantes negociaciones políticas. 

En ese sentido, Frigerio insistió con las chicanas. "Siempre la defiendo", afirmó, y agregó que considera a Carrió como "una gran dirigente política", pero volvió a destacar que la administración de Cambiemos "está trabajando en construir una república con independencia de poderes", por lo cual insinuó que las exigencias de la dirigente chaqueña no deberían dirigirse al Ejecutivo.

El que se puso en el medio de la cuerda entre Carrió y el macrismo duro fue Garavano, que, por un lado, deslegitimó el reclamo de "Lilita"  al sostener que el líder PRO la respalda en su lucha contra la corrupción, pero por otro la elogió por su liderazgo en ese tópico.

"(El Presidente) nos marcó desde un principio la prioridad de combatir la corrupción", dijo el funcionario para bancar a Macri, pero también destacó que por "alerta de la diputada Elisa Carrió se dispuso que los directivos de la constructora brasileña en Argentina aporten toda la información disponible para elevarla a la Justicia", en una demostración de cómo "Lilita" le marca cierto pulso al Ejecutivo.


Finalmente, quien salió fuerte a bancar a Carrió fue Rodríguez Larreta, el alcalde porteño, casualmente territorio donde la aliada del oficialismo competirá para renovar su banca en el Congreso. "Representa los valores de Cambiemos", dijo el jefe de Gobierno porteño. 

"Es un orgullo que 'Lilita' sea nuestra candidata (por la Ciudad en las elecciones legislativas). Hemos trabajado con ella y su equipo. Ella representa los valores de Cambiemos", expresó Larreta en declaraciones a la prensa durante un acto por el 81° aniversario del Obelisco, un día después de los pedidos de ser defendida que lanzó Carrió en televisión. 

Luego, el exjefe de Gabinete de la gestión Macri en la Ciudad coincidió en el análisis de Garavano que deja ver la influencia de la líder de la CC a través de sus presiones mediáticas: "Ayer el Presidente instruyó al ministro de Justicia que avance lo más rápido posible para conseguir la información del caso Odebrecht, que es uno de los temas de los cuales la doctora Carrió está hablando en estos días".