A pesar de que con la pandemia algunas firmas de productos alcohólicos pudieron crecer,
no es el caso de aquellas que circulan más en las actividades nocturnas, como el champán: la Bodega Chandón solicitó al Gobierno cobrar la ATP, para que así el Estado se haga cargo de una porción de los sueldos de los trabajadores.
Según publicó el portal Letra P, la firma aclaró que la inclusión fue en la primera oleada de los ATP. Luego,
con las aperturas de la economía por regiones, la compañía pudo robustecer sus finanzas y desistió del dinero del Estado.
Chandón no sólo fabrica su más famoso champán, sino que también produce algunos de gama media como Valmont, Terrazas de los Andes y Latitud 33. Cuenta con 600 empleados directos y el 40% de sus ventas responde a restaurantes y boliches, dos rubros que están cerrados a cero desde el inicio del confinamiento por la Covid-19 casi a finales de marzo.
Desde el sector contaron al mismo medio que muchas bodegas, principalmente las más pequeñas, continúan necesitando y anotándose en el beneficio conocido por las siglas ATP. “Seguramente, los sectores que abastecemos sean los últimos en abrir”, explicaron.
Hoy, la actividad en Mendoza está en un proceso de nueva normalidad, que incluye la apertura de locales que venden vinos y espumantes, cerrados en la primera etapa, pero el volumen del negocio precisa de la "noche", es decir de los hoteles, los boliches y los bares.
