07.04.2022 / Por iniciativa de EEUU

La ONU suspendió a Rusia del Consejo de Derechos Humanos y habló de crisis humanitaria en Ucrania

Casi la mitad de los países miembros de la ONU votaron a favor de correr a Rusia de su banca en el espacio de DDHH de la Organización. La desición fue confirmada a partir de un documento que se publicó en los perfiles oficiales y catalogada como "histórica".





Durante este mediodía, en la Asamblea General de las Naciones Unidas se llevó adelante una votación que concluyó con una "resolución histórica", la suspención de la Federación Rusa del Consejo de Derechos Humanos debido la invasión que mantiene sobre territorios ucranianos desde el pasado 24 de febrero. La medida fue apoyada por la mayoría de los países que componen la Organización -entre ellos Argentina- aunque con una cantidad importante de abstenciones.

La ONU lanzó un comunicado en sus redes sociales oficiales, a partir del cual confirmaron que la Asamblea General "adopta una resolución histórica en la que suspende a Rusia del Consejo de Derechos Humanos y expresa gran preocupación por la actual situación de derechos humanos y la crisis humanitaria en Ucrania". La iniciativa que lanzó Estados Unidos junto a sus aliados fue aprobada con 93 votos a favor, 24 en contra y 58 abstenciones (entre las que destacan Brasil y México en el plano regional).

Por su parte, el embajador ucraniano ante Naciones Unidas, Sergiy Kyslytsya resaltó que "Rusia no sólo está cometiendo violaciones de los derechos humanos, sino que está sacudiendo los cimientos de la paz y seguridad internacional" y planteó ante todos los representantes que votar en contra de la iniciativa equivaldría a "apretar el gatillo" contra los civiles ucranianos y sería una muestra de "indiferencia" similar a la que en 1993 permitió que se cometiese un genocidio en Ruanda.

La única vez que la ONU había tomado una definición similar fue en marzo del 2011 cuando suspendió a Libia -también impulsada en su momento por Estado Unidos- por la represión que llevó adelante el gobierno de Muamar Gaddafi contra las protestas en su contra y llevó a la caída del mismo.

En su momento, el Secretario General de la ONU, Ban Ki-moon (2007-2016), dejó en claro que mantendrían dicha suspensión si continuaba la violencia. "El mundo ha hablado con una voz: pedimos el fin inmediato a la violencia contra los civiles y el respeto total a los derechos humanos, incluidos la libertad de asamblea y expresión", manifestó.