25.01.2023 / Crimen de Fernando Báez Sosa

Alegato de Burlando: el crimen de Báez Sosa fue "planeado" y "sobra para condenar a perpetua” a los rugbiers

Después de que la fiscalía pidiera la máxima pena para todos los imputados y que se investigue a TIC y Guarino por falso testimonio, el abogado de la familia de Fernando comenzó diciendo que "todos" los imputados asesinaron al joven y remarcó que fue un crimen “planeado”.




Después de que la fiscalía pidiera la máxima pena para los ocho imputados y que se investigue a "rugbier N 11" y Juan Pedro Guarino por falso testimonio, el abogado de la familia de Fernando Báez Sosa, Fernando Burlando, comenzó su alegato enfatizando en lo "planeado" del crimen y por eso sostuvo que "alcanza y sobra para condenar a perpetua” a todos los rugbiers.

“Todos asesinaron a Fernando Báez Sosa”, empezó Burlando y definió, a partir de ejemplificar con diversas situaciones que surgieron de los videos y las declaraciones de los testigos, que lo que atravesó el joven asesinado en Villa Gesell fue un “suplicio”.

En ese punto, se refirió al gesto de Báez Sosa, ya tirado en el piso golpeado, y fue contundente: “(Fernando) Pidió clemencia y la respuesta fue una patada en la cabeza, una más y otra más. Era una bolsa de papas y continuaron pegándole”.

En el comienzo de su alegato, explicó: “Adelanto que adherimos al contenido de la alegación del Ministerio Público Fiscal en el aspecto formal y su contenido y, obviamente, lo que no se contraponga lo que a partir de este momento vamos a manifestar”.

Al referirse a la actitud de los rugbiers posterior al crimen, Burlando dijo: “Matar les dio hambre. La imagen de Fernando Báez Sosa de rodillas, pidiendo clemencia. Esa es la imagen que para esta representación justifica ni mas ni menos el pedido de prisión perpetua para los acusados”.

Luego, el abogado siguió su alegato con un concepto que atravesó el debate, y que tiene que ver con la figura de premeditación, que busca evitar la defensa de los rugbiers: “Lo que hubo fue un asesinato planeado, una acción criminal coordinada, un asesinato en el peor de los estados que puede tener un ser humano,que es el estado de indefensión; y además practicado de una manera alevosa”.



“Además se dieron el gusto de acusar a un inocente. Fernando Báez Sosa pidió clemencia y no se la dieron. Basta ver y oír la evidencia para entender que pidió compasión y no se la dieron. Lejos de eso, siguieron pegándole. Buscaron la muerte con golpes que fueron disparos de armas: cada golpe era un disparo, cada patada un tiro. Fue fusilado a golpes y a patadas”, dijo.

Luego, explicó que la motivación de ataque frente al local bailable Le Brique y "todo ese ensañamiento tuvo como foja cero un simple y accidental empujón en un lugar donde era imposible caminar", pero que eso, que particularizaron los rugbiers en Fernando, había ofendido "al líder de la manada, Máximo Thomsen, al que los demás acompañaban de manera proactiva”.

“A la luz de las pruebas obtenidas, anunció el desenlace con el gesto del dedo pasándoselo de izquierda a derecha. Donde esta amenaza de muerte luego se constata”, dijo en referencia a un video que se analizó durante una de las jornadas técnicas del debate.