
El senador nacional Eduardo "Wado" de Pedro, presidente de la Comisión de Educación y Cultura, encabezó la jornada “Repensar la Educación Técnico Profesional en tiempos de revolución tecnológica” y, en ese marco, llamó a no tener "nunca más gobiernos que destruyan el trabajo, la industria nacional y la educación argentina”.
Con una amplia participación de referentes del sistema educativo, del sector productivo, del sindicalismo y del ámbito científico-tecnológico, se desarrolló la jornada con foco en la educación, la ciencia y el trabajo, organizada por dirigente peronista.
Al cerrar el encuentro, Wado propuso “iniciar un proceso colectivo, plural, participativo y federal, que convoque a la CGT, a la UIA, a las universidades, a los estudiantes y a todo el sistema científico-tecnológico para repensar la educación técnico profesional en el marco de la revolución tecnológica, la inteligencia artificial y el cambio climático, que tienen un gran impacto en los métodos de producción”.
“Queremos diseñar un modelo educativo y productivo que agregue valor, genere trabajo y le dé horizonte a las nuevas generaciones”, afirmó. Y agregó: “Tenemos que decirlo claramente: nunca más a gobiernos que vienen a destruir el trabajo, la industria nacional y el sistema de educación en la Argentina”.
Wado de Pedro ponderó los resultados de la Ley 26.058 de Educación Técnico Profesional, a 20 años de promulgada: “Esta ley recuperó una tradición muy valiosa de la Argentina que inició Perón, continuó Frondizi y consolidaron Néstor y Cristina Kirchner: la de vincular el trabajo con la educación, el conocimiento con la producción, y la escuela con un modelo de desarrollo nacional”, señaló.
Enumeró que la normativa tuvo resultados concretos, como los “1,9 millones de argentinos y argentinas pudieron formarse, obtener un título y acceder a un empleo digno” y subrayó: "Primero que nada tenemos que defender esa excelente ley y defender a la educación técnica profesional y agraria, porque el presidente de la Nación mandó un presupuesto para 2026 sin los fondos para que los pibes y las pibas puedan seguir formándose”.
La jornada se extendió a lo largo de toda la tarde y contó con tres paneles temáticos donde especialistas nacionales e internacionales debatieron sobre los principales ejes que atraviesan hoy a la Educación Técnico Profesional. Durante el cierre, De Pedro entregó diplomas de honor del Senado en reconocimiento a referentes, docentes, estudiantes, instituciones y proyectos destacados de la educación técnica y formación profesional.
El primer panel, titulado “A 20 años de la Ley de ETP: diagnóstico, desafíos y oportunidades para el futuro”, contó con la participación del ex ministro Daniel Filmus, la diputada Blanca Osuna, Javier Viqueira (ADIMRA), Gerardo Marchesini (exdirector del INET), Ariel Guede (AMET), Mónica Sladogna (Fundación Friedrich Ebert) y el representante estudiantil Juan Diosques, del Agrotécnico N°1 de Santiago del Estero. Abordaron la génesis de la ley, sus resultados y la necesidad de actualizar el sistema, fortalecer la formación docente y asegurar la continuidad del financiamiento previsto por la norma.
El segundo panel, “Experiencias y aprendizajes en la educación técnica y la formación profesional para el trabajo”, reunió a Eduardo Uziel (Embajada de Brasil), Peter Neven (Embajada de Alemania), Pablo Fiuza (Cámara de la Industria del Software), Erika Bienek (Techint), Gustavo Gándara (Fundación UOCRA) y Gaston Grizzo (CAME). El intercambio abordó experiencias internacionales y locales, destacando la articulación entre empresas, sindicatos y el Estado para anticipar los nuevos perfiles laborales y fortalecer la inserción de jóvenes y trabajadores en el mercado productivo.
El tercer panel, “Educación técnica y producción para la Argentina del futuro”, se realizó junto a Wado de Pedro y tuvo como expositores a Rubén Soro (UTN), Javier Ditto (SMATA), Silvio Zurzolo (UIA) y Axel Haber (Movimiento Industrial), con la moderación de María Bielli.
El encuentro sintetizó los principales desafíos del sistema educativo: la necesidad de actualizar los contenidos curriculares para incorporar saberes tecnológicos emergentes, fortalecer la formación docente en diálogo con los sectores productivos, garantizar la equidad territorial e inclusión, articular la educación con el trabajo y la producción, y reafirmar el financiamiento federal ante el intento del actual gobierno de eliminar el Fondo Nacional para la Educación Técnico Profesional del presupuesto 2026.