El jefe de Gabinete, Manuel Adorni, anunció que el presidente Javier Milei firmará este viernes el decreto que convoca a sesiones extraordinarias a partir del 10 de diciembre, con un temario cargado que revela la premura del oficialismo por asegurar respaldo parlamentario a su batería de reformas. La movida ocurre en simultáneo con las negociaciones que encabezan Martín Menem y Patricia Bullrich en el Congreso, y Diego Santilli desde el Ministerio del Interior, para garantizar votos en ambas cámaras.
El temario difundido por el Ejecutivo incluye el Presupuesto 2026, la ley de Inocencia Fiscal, un compromiso nacional de estabilidad monetaria y fiscal, una propuesta de modernización laboral y una reforma integral del Código Penal. También se suma la “adecuación” de la ley de glaciares, cuyo objetivo –según admiten en Casa Rosada– es flexibilizar regulaciones ambientales que hoy impiden determinados emprendimientos extractivos.
El proyecto de Presupuesto aparece como la prioridad inmediata. El texto enviado al Congreso prevé consolidar el “equilibrio fiscal” como base del programa económico, con recortes y reasignaciones que afectan áreas sensibles como salud, educación y seguridad social. En paralelo, el Gobierno busca avanzar con la reforma del Código Penal, que endurece penas, amplía delitos imprescriptibles y restringe regímenes de excarcelación, un enfoque punitivista que ya despierta reparos en organismos de derechos humanos.
Otro punto clave es la ley de Inocencia Fiscal, presentada por el oficialismo como incentivo para que personas con dinero no declarado lo blanqueen sin riesgo de sanciones. “El proyecto busca dar certeza a las personas para que blanqueen el dinero no declarado en la economía real”, precisaron fuentes oficiales. Aunque fue girado al Congreso en junio, nunca había sido activado; ahora LLA pretende aprobarlo cuanto antes para captar fondos que hoy circulan por fuera del sistema.