La dirigente social Milagro Sala fue internada bajo estricta observación médica en un hospital de La Plata tras una descompensación que obligó a su derivación de urgencia, en un cuadro asociado a afecciones crónicas de circulación sanguínea que requieren seguimiento permanente.
La internación fue confirmada por su médico personal, Jorge Rachid, quien explicó que la decisión respondió a la necesidad de estabilizar el cuadro clínico y mantener un control preventivo continuo, mientras se evalúa la evolución de una trombosis diagnosticada años atrás y sus complicaciones recurrentes.
El traslado al centro de salud, realizado sin notificación previa debido a la emergencia, activó alertas en el sistema de monitoreo electrónico que controla su arresto domiciliario, lo que derivó en la intervención de la Justicia jujeña y en el envío de una comitiva a Buenos Aires para constatar el estado de salud y los alcances de la internación.
Sala reside en la capital bonaerense desde 2023, cuando se autorizó su traslado desde Jujuy para acceder a tratamientos médicos que no estaban disponibles en su provincia de origen, y desde entonces su domicilio fue fijado en cercanías del Hospital de Gonnet, donde se concentra su historia clínica.
En paralelo, la dirigente atraviesa una situación de inestabilidad habitacional tras el vencimiento del contrato de alquiler de la vivienda donde cumplía la prisión domiciliaria, un cambio de domicilio que, junto con la internación, quedó bajo revisión judicial mientras su entorno insiste en que ambas situaciones respondieron a razones de fuerza mayor vinculadas exclusivamente a su salud.