La negociación entre el equipo económico de Mauricio Macri y la misión del Fondo Monetario Internacional para la Argentina negocian a contrareloj a la espera de una definición que permita reforzar el acuerdo alcanzado en la primera parte del año pero que en la Casa Rosada consideran insuficiente para afrontar los compromisos asumidos.
Desde la misión encabezada por el italiano Roberto Cardarelli manifestaron mediante un comunicado que hay
"avances importantes hacia el fortalecimiento del plan de política económica de la Argentina, respaldado por el acuerdo stand-by con el FMI".
Por otro lado intentaron despejar todo tipo de rumores después de que en la última semana el FMI frene el desembolso de 3000 millones de dólares que ya había sido pactado en el mes de junio. En particular consideran que este desembolso
sería "clave" para asegurar el repago de la deuda argentina.
Los miembros designados por Dujovne y Luis Caputo para negociar fueron halagados por las autoridades de la entidad de financiamiento y destacaron estar "
trabajando arduamente para concluir estas conversaciones a nivel técnico pronto y presentar una propuesta al Directorio Ejecutivo del FMI".
Además de un adelanto en los recursos, desde el Gobierno esperan modificar la cláusula que limitaba al Banco Central a intervenir en la política monetaria. La idea es que Luis Caputo pueda tener mayores herramientas para actuar en caso de una corrida bancaria que pueda producirse nuevamente.