Mientras los principales medios en la Argentina marcan agendas en las que se discuten cuestiones accesorias y hasta se deforman frases de dirigentes con el propósito de generar debates que ocupen páginas y scrolls de pantallas por igual,
el FMI salió a afirmar que "cada uno de los candidatos" que participará de las elecciones presidenciales está "convencido" de aplicar reformas de ajuste como la previsional y la laboral que pide el organismo.
"Existe en la Argentina un profundo convencimiento de que para que el país acelere su crecimiento de manera sostenible hay que profundizar el proceso de cambios estructurales en la economía", aseguró Alejandro Werner, el director del Departamento del Hemisferio Occidental del FMI, durante una conferencia de prensa en la sede del Fondo.
Según Werner, recogió esta impresión en sus reuniones con los candidatos presidenciales de la oposición y con funcionarios del Gobierno, que tuvieron lugar en los últimos meses en el marco de las revisiones periódicas del acuerdo stand by.
Si uno se quedara con esta idea del ente multilateral de crédito, más allá de las chicanas de la campaña y las acusaciones cruzadas, todos los aspirantes estarían de acuerdo en avanzar con las polémicas reformas laboral y previsional que impulsa el FMI y también la gestión de Mauricio Macri, además de la tributaria, que es la que menos polémica genera.
"Hay visiones diferentes sobre dónde poner el énfasis en ese cambio estructural", reconoció el funcionario, pero sostuvo que "claramente" al hablar de la necesidad de implementar las reformas estructurales, tributaria, previsional y laboral, que el Fondo viene reclamando con insistencia creciente, hay importantes coincidencias.
Y agregó: "Hay una visión en cada uno de los candidatos y en el Gobierno de que el gobierno siguiente tiene que fijar una agenda de transformaciones muy importante para restablecer el proceso de crecimiento y de inversión".
A pesar de que el jefe del FMI para la región no dio nombres específicos ni aclaró posturas con exactitud,
parecería estar incluido en su afirmación acerca del "consenso" de los presidenciales el caso del Frente de Todos, ya que hace un mes, más precisamente, a fines de junio, Werner se encontró en Buenos Aires con Alberto Fernández y parte su equipo económico para hablar del programa abierto con el país.
Sin embargo,
Fernández aclaró más de una vez que, al menos en los casos previsional y laboral, en caso de ganar los comicios su administración no avanzará en la dirección de reformas de ajuste de ese tipo.
Hace sólo 15 días, el precandidato presidencial por el Frente de Todos rechazó de plano la necesidad de una reforma laboral para reactivar la economía como lo promete el Gobierno, como exige el Fondo y como sí se mostró de acuerdo, por ejemplo, Roberto Lavagna.
“No estoy de acuerdo con una reforma laboral porque tenemos otras urgencias. ¿Cómo es esto de que para que Argentina progrese tenemos que sacar derechos?”, se preguntó Fernández en una entrevista con Radio Con Vos.
En cuanto a la reforma previsional, en los últimos días el ex jefe de Gabinete prometió que de llegar a la Presidencia los jubilados tendrán medicamentos gratuitos y, además, que el 10 de diciembre aumentará los haberes de los abuerlos en un 20%.
Además, hace días también le pegó a la propuesta de "cambio estructural" en que acuerdan el Fondo y Juntos por el Cambio.
"Me lo ha dicho el FMI, el Gobierno se ha comprometido a una nueva reforma previsional y una nueva reforma laboral. Y eso es más miseria para los jubilados y para los que trabajan. Si quieren un presidente ajustador, no me voten a mi, voten a Macri", disparó.
