A pesar de los fantasmas de "fraude" denunciados por Elisa Carrió y los trolls oficialistas, si la pelea para las elecciones generales de octubre era difícil para Juntos por el Cambio por los 15 puntos de distancia en el conteo provisorio de las PASO del 11 de agosto, el escrutinio definitivo deja la situación del golpeado macrismo al borde de la quimera:
se computaron 19 de los 24 distritos y la distancia entre Alberto Fernández y Mauricio Macri se amplió en 71.871 votos y casi medio punto porcentual.
Cuando terminó el conteo provisorio y el Gobierno se chocó con el baldazo de agua fría de que el Frente de Todos logró un 47,65%, más de 15 puntos arriba del 32,08% de Juntos por el Cambio, "Lilita", otros dirigentes border del oficialismo y bots y trolls en redes salieron al unísono a denunciar irregularidades. Ahora,
10 días después, la Cámara Nacional Electoral ya tiene los resultados en 19 distritos y, con ese global parcial, la diferencia a favor de Alberto se estiró todavía más.
Hasta anoche, con
Catamarca, Córdoba, Chubut, Entre Ríos, Formosa, Jujuy, La Pampa, La Rioja, Mendoza, Misiones, Río Negro, Salta, San Juan, San Luis, Santa Cruz, Santa Fe, Santiago del Estero y Tierra del Fuego escrutados definitivamente, el candidato del Frente de Todos llevaba había ampliado su triunfo en unos 75 mil votos.
Horas después, como contó Clarín, se sumaron los números finales de la
Ciudad de Buenos Aires (CABA) -el distrito en que quedaban las esperanzas oficialistas- y Macri recortó 3 mil voluntades. Así,
la diferencia ahora está en torno a los 72 mil votos, que representan casi medio punto porcentual.
Entre todos los distritos escrutados de forma definitiva en las primarias, está representado el 52,5% del peso electoral de todo el país, si se toman como parámetro los votos afirmativos en las últimas primarias. El 47,5% restante se reparte entre las provincias de Buenos Aires, Chaco, Corrientes, Neuquén y Tucumán.
En esos 19 distritos computados en el escrutinio provisorio, Alberto Fernández había juntado 5.591.387 votos afirmativos que significaban un 45,39%. Macri, por su parte, había alcanzado 4.388.052 sufragios que acumularon un 35,62%.
Ahora, en el conteo definitivo en esas mismas provincias (con el 100% escrutado), el Frente de Todos sumó 172.633 sufragios y 0,19 puntos porcentuales. Con eso, subió a 5.764.020 votos y su porcentaje pasó a 45,58%. Juntos por el Cambio consiguió 100.762 sufragios más, con lo que totalizó 4.488.814 votos y quedó en 35,49%, ya que bajó 0,13 puntos porcentuales.
De estos datos surge como conclusión que la diferencia en las 19 provincias hasta el conteo provisorio era de 1.203.335 votos y 9,77 puntos, y con el definitivo pasó a 1.275.206 sufragios y 10,09 puntos. La brecha se amplió en 71.871 votos y 0,32 puntos porcentuales.
El panorama es negro para Macri de cara a lo que queda hacerse del escrutinio definitivo: falta la poblada provincia de Buenos Aires, territorio donde los Fernández lograron una mayor diferencia, por lo que es vox populi que cuando se finalice el proceso mejorarán todavía más los números de Fernández y caerán los de Macri.
El conteo definitivo en todo el país terminaría en no menos de una semana, justamente por el peso electoral del territorio bonaerense, donde se concentra el 37% del padrón de todo el país.
