13.05.2020 / La oposición

Desde Macri a Espert: a qué se dedican los cinco ex candidatos presidenciales que perdieron contra Alberto

A poco más de seis meses de las elecciones 2019 que llevaron al Frente de Todos a la Rosada y en plena pandemia del coronavirus, los diversos aspirantes que compitieron en esos comicios ocupan distintos roles en la política nacional y al interior de sus partidos. Desde el escondite del ex mandatario, pasando por la presencia en el Congreso de Del Caño, hasta el mediático Espert.




Desde el escondite a sol y sombra de Mauricio Macri -con excepciones públicas poco felices- hasta la ultra exposición de José Luis Espert en tiempos de pandemia y dificultades económicas, pasaron sólo poco más de seis meses desde las elecciones 2019 que llevaron al Frente de Todos a la Casa Rosada con Alberto Fernández y Cristina Fernández de Kirchner, y la actualidad de los diversos ex candidatos presidenciales que compitieron en esos comicios y fueron derrotados es sumamente disímil: ocupan distintos roles en la política nacional y al interior de sus partidos, y, principalmente, de cara a la sociedad. Vamos en orden.

El segundo fue Macri. Tal como recorrió Perfil en un artículo, el ex presidente buscó la reelección y terminó como el primer oficialista en caer y fuerte en primera vuelta. Actualmente, el espacio que (re)fundó para esos comicios, Juntos por el Cambio, se mantiene unido pero a los tumbos por las diferencias que surgieron entre los que sus dirigentes que gobiernan y los que opinan sin cargo o con bancas legislativas.

Macri, en tanto, no tiene garantizado ni siquiera su liderazgo en el PRO. Horacio Rodríguez Larreta lo duplica en imagen positiva y casi lo triplica en diferencial positivo, según una perspectiva casi unánime de todos los sondeos de opinión. Al menos, como dato optimista, se mantiene unido con Miguel Ángel Pichetto, quien lo acompañó en la fórmula. María Eugenia Vidal, en tanto, se muestra más bien prudente, como el jefe de gobierno porteño, mientras que Patricia Bullrich, que conduce las riendas del partido que fundó, encabeza la línea dura que él fomenta. Marcos Peña, quien fuera su número dos, está con "cero actividad política", aunque según Clarín rompió la cuarentena para un almuerzo político con Larreta.

Ni bien terminó la elección, Macri guardó silencio, pero intentó sacar la cabeza de la cueva más de una vez. No le fue bien. Primero comparó al “populismo” con el coronavirus, cuando la pandemia aún no despegaba. Patinó fuerte y lo criticaron todos. Luego firmó un documento presentado por la Fundación Internacional para la Libertad (FIL) contra el “autoritarismo” de los gobiernos que ponderaron la salud ante la pandemia. De su partido lo acompañaron pocos, como la ex ministra de Seguridad. A partir de allí, se silenció.

“Es prudente que no hable”, reconoció el presidente de la UCR, Alfredo Cornejo. Bullrich dijo estos días que está guardado porque el oficialismo lo quiren usar de "puchinbol". Por ahora, salvo que decida repentinamente un cambio de estrategia, seguirá de la misma manera, dicen en su círculo más cercano.

Tercero quedó Roberto Lavagna. Los temas deuda y consejo económico y productivo lo ponen, cada tanto, en agenda. En términos electorales y políticos, en 2019 parece haber cumplido su objetivo. Intentó romper la polarización, pero no pudo. A partir de ahí, cercano a las ideas de Fernández, como se sabía y generaba cuestionamientos acerca de su jugada por afuera, se encargó de posicionar a sus principales dirigentes en áreas de gestión.

Tuvo reuniones públicas -y sobre todo privadas- tanto con el ministro de Hacienda Martín Guzmán, como con el presidente Alberto Fernández. Su hijo, Marco, es el titular del INDEC, nada más y nada menos. En sus conversaciones con el titular de la cartera económica, y otras, el tema excluyente es sin duda alguna la deuda externa.

En cuanto a un posible cargo, que el Presidente públicamente mantuvo como un deseo propio, Lavagna insiste que no quiere aceptar una función institucional dentro del nuevo gobierno, aunque nunca dejó de dar su opinión al equipo de Guzmán. En cuanto a su candidato a vice, Juan Manuel Urtubey, el vínculo es prácticamente inexistente porque el ex gobernador de Salta ni siquiera está en el país. Con Margarita Stolbizer no existe relación.

La expectativa para este ex candidato y ex ministro de Economía de Néstor Kirchner, para la que parece estar bien encaminado, es posicionar como aliados en el Frente de Todos a sus dirigentes más cercanos, a quienes parece observarse bien parados para 2021.

Nicolás del Caño fue el cuarto y está en el Congreso. El dirigente mendocino fue el candidato de la Izquierda, al igual que en
2015, bajo la denominación del Frente de Izquierda y los Trabajadores. Tras el resultado negativo, con una elección floja en términos de votos y porcentajes, volvió a su banca de diputado, al igual que su aspirante a vice, la docente gremial Romina del Plá.

Desde la elección lograron sostener la integración amplia de partidos de izquierda que supieron construir para los comicios 2019 “Fuimos el bloque que presentó un proyecto de ley de impuesto a las grandes fortunas, las altas rentas y los terratenientes, que permitiría establecer un un salario de cuarentena de $30.000, sin exclusiones, además de conseguir recursos para paliar las necesidades del sistema de salud frente a la pandemia y construir 100.000 viviendas en un año”, graficó un asesor parlamentario del espacio a Perfil, buscando validar la presencia del espacio en la política argentina actual.

En quinto lugar quedó, y sorprendió, el ex carapintada y funcionario macrista Juan José Gomez Centurión. A las eleccones llegó a la recta final cuando muchos pensaban que terminaría bajándose. Pero logró un éxito político en concentrar su campaña y su nicho de votantes en la discusión por la legalización del aborto. Eso lo hizo ser uno de los principales exponentes del “pañuelo celeste”. Este año, si el Gobierno envía su iniciativa respecto de ese tema, puede ponerlo de nuevo en el centro de la escena. Casi sin estructura logró terminar cuarto, por encima de José Luis Espert (obtuvo 1,71% de los votos).

Según dijo públicamente, la expectativa y el proyecto de Gómez Centurión apunta a reforzar el espacio a nivel nacional para tener representación en todas las provincias en 2021. No es sencillo, como ya vieron él y Espert en 2019, ya que se trata de un proceso de avales burocráticos para ser aceptado como partido. En caso de lograr ese objetivo, en su mesa chica dicen que van a "meter legisladores en las provincias y concejales en cada distrito“.

El último fue José Luis Espert, que busca posicionarse como la nueva derecha "libertaria". Con laderos que abandonaron su nicho en la economía para opinar con muy poca pericia científica acerca del coronavirus, Espert, a pesar del magro resultado (último con 1,47 por ciento de los votos), se mostró de muy buen ánimo de cara a lo que sigue y ahora recorre los canales de TV.

Por su rol de economista levantó el perfil en las últimas semanas a medida que avanzó la -por ahora trunca- negociación del Gobierno con el FMI y que los políticos opositores debaten en medios acerca de si hay que seguir con una cuarentena o si hay que abrir todo y ponderar los números.

Por ahora, necesita construir un espacio y que tenga actores políticos. Debe sumar otros sectores de la derecha argentina para diferenciarse de lo que pueda buscar agrupar el PRO. ¿Javier Milei? "Vamos a participar en 2021", repite Espert. Además de ir por liberales que no jugaron en la última elección, hay conversaciones con Ricardo López Murphy, que fue ministro de Fernando de la Rúa y luego fracasó en un intento presidencial.