En una jornada marcada por el horario reducido de operaciones en Nueva York tras el Día de Acción de Gracias, el S&P Merval volvió a subir y consolidó su cuarto avance consecutivo. La plaza porteña operó con mayor volatilidad, pero logró sostener la tendencia alcista que se viene afirmando a pesar del contexto externo limitado.
En paralelo, los bonos soberanos mostraron una dinámica mixta en Wall Street, donde la operatoria funcionó a media máquina. La falta de referencia plena del mercado estadounidense dejó a los títulos argentinos sin un norte claro y con variaciones acotadas, lo que mantuvo al riesgo país alrededor de los 652 puntos básicos.
La jornada combinó el empuje de las acciones locales con un clima financiero internacional más liviano, que dejó al mercado argentino relativamente desacoplado sobre el cierre. Aun así, el balance semanal volvió a exhibir la fuerza del movimiento bursátil doméstico, en un contexto donde la incertidumbre económica y la tensión social siguen marcando el pulso de la política nacional.