Las acciones argentinas que cotizan en Nueva York revirtieron el optimismo inicial de la rueda y cerraron con retrocesos de hasta 1,7%, en una jornada marcada por la cautela de los inversores y un nuevo repunte del riesgo país. El mal clima financiero contrastó con la expectativa oficial de estabilización y dejó en evidencia la fragilidad del frente externo.
En el plano local, el S&P Merval subió 0,4% y se ubicó en torno a los 3,13 millones de puntos, mientras que medido en dólares también mostró una leve mejora, impulsado por la dinámica de los tipos de cambio financieros. Sin embargo, el movimiento del mercado doméstico no logró compensar el desempeño negativo de los ADRs en Wall Street.
Entre las acciones líderes, Cresud, Banco Macro y Grupo Financiero Galicia encabezaron las subas, mientras que Transener figuró entre las más castigadas. En Nueva York, IRSA y Cresud mostraron avances, pero otras compañías financieras cerraron en terreno negativo, reflejando la selectividad del mercado y la falta de una tendencia clara.
En el segmento de deuda, los bonos soberanos en dólares operaron de manera dispar, con subas de hasta 0,3% en algunos títulos como el Bonar 2029 y el Bonar 2041, aunque otros papeles registraron bajas. En ese contexto, el riesgo país volvió a afirmarse cerca de los 579 puntos básicos, un nivel elevado que siguió condicionando las expectativas financieras.
La combinación de acciones volátiles, bonos sin impulso y un riesgo país persistentemente alto volvió a mostrar los límites del esquema económico actual, en un escenario donde los mercados siguieron demandando señales más claras de sostenibilidad y solidez macroeconómica.