El dólar arrancó la última semana de 2025 con una tendencia alcista, en un contexto marcado por la expectativa del nuevo régimen de bandas y por la necesidad oficial de recomponer reservas. La suba se dio en los días previos al pago de más de US$4.300 millones a bonistas en enero, un compromiso que vuelve a poner presión sobre el esquema cambiario y financiero.
En el mercado oficial, el tipo de cambio mayorista se vendió a $1.455,5, con un incremento de $2,50 respecto del cierre previo. En tanto, el dólar minorista alcanzó los $1.480 en el Banco Nación y promedió $1.480,01 en las pizarras que releva el Banco Central de la República Argentina, en una señal de deslizamiento controlado pero persistente.
Los dólares paralelos volvieron a ubicarse como los más caros del mercado. El dólar blue se ofreció a $1.535, con una suba de $5 en la jornada, mientras que el contado con liquidación operó en torno a los $1.530 y el MEP avanzó levemente hasta los $1.487. También el dólar cripto acompañó la tendencia y se ubicó por encima de los $1.539.
En el mercado de futuros se observaron incrementos generalizados, con excepción del contrato de diciembre. Las expectativas para los próximos meses reflejaron un ajuste al alza: el dólar proyectado para junio se negoció en torno a los $1.661, confirmando que, pese al nuevo esquema anunciado, el mercado sigue incorporando escenarios de mayor tensión cambiaria.